Buenos Aires, EFE El Gobierno de la provincia de Buenos Aires habilitó hoy un operativo de búsqueda de posibles extraviados entre los asistentes al concierto de Indio Solari que el domingo dejó dos muertos y multitud de heridos en la localidad de Olavarría.
Este lunes dos personas continuaban hospitalizadas debido a las lesiones sufridas en el concierto, donde el exceso de aforo produjo una avalancha humana que fue la causante de las víctimas.
El ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, subrayó hoy, durante una rueda de prensa concedida en Olavarría, que son los allegados los que deben denunciar las desapariciones de aquellas personas que asistieron al recital y de las que no tienen noticia.
"Aún hay unas 80 personas alojadas en Olavarría y en sus alrededores", dijo Ritondo, y agregó que necesitan las denuncias de desapariciones para saber "qué tienen que encontrar".
Pidió, además, que los asistentes al concierto que aún no se han comunicado con sus familiares lo hagan para poder descartarlos como posibles desaparecidos.
El ministro cuestionó que los operativos de seguridad en las calles durante el espectáculo fallaran.
Ritondo especificó que en esta ocasión -al contrario que en el último concierto del Indio Solari en el municipio bonaerense de Tandil hace un año-, "había 200 policías más", pero que "no se controló el ingreso" de gente sin entrada al recinto.
Culpabilizó de esto a la productora encargada del concierto y explicó que fue el municipio quien firmó un contrato con esa empresa y que la seguridad del evento corría a su cargo.
Además de las tareas de rastreo de posibles desaparecidos, el Gobierno confirmó que 50 efectivos realizan tareas de asistencia para facilitar alojamiento temporal a las personas que aguardan aún poder retornar a sus hogares.
El pasado sábado, la ciudad, ubicada en la provincia de Buenos Aires -a unos 350 kilómetros al sur de la capital argentina-, se vio colapsada con la llegada de más de 300.000 espectadores para presenciar el recital del rockero argentino Indio Solari, por lo que las vías de acceso quedaron desbordadas, lo que impidió que los asistentes pudieran retornar a sus ciudades de residencia.
El Gobierno también dispuso, a través del Regimiento de Caballería de Tanques 2 de Olavarría, la distribución de agua potable a las personas afectadas.
Además, con colaboración del Grupo De Artillería Blindado 1 de Azul, se pusieron a disposición del Ejecutivo local dos autobuses con capacidad para 42 pasajeros con el fin de realizar el traslado a la ciudad de Bahía Blanca, de donde proceden varios de los damnificados, a 300 kilómetros de distancia.
eldia