Entre los acusado se ve al expresidente Carlos Menem, aunque fue ausente en el juicio por problemas de salud. Otros acusados son el extitular de los servicios de inteligencia, Hugo Anzorreguy, y el destituido juez Juan José Galeano.
Entre otros delitos se les imputa violación de medios de prueba, falsedad ideológica, encubrimiento, abuso de autoridad y peculado.
La justicia argentina también el año pasado acusó a la presidenta actual, Cristina Fernández de Kirchner de encubrimiento en el caso de AMIA. El fiscal fallecido, Alberto Nisman, les denunció a la presidenta Fernández y su canciller Héctor Timerman en el caso por el memorándum de entendimiento firmado con Irán para esclarecer el atentado.
Parce que el loby de los sionistas es tan potente en Argentina que lleva a los presidentes al banquillo de la justicia, pese a que haya intentado encontrar la verdad.
Fernández acusó a la oposición y algunos grupos de presión de no querer aclarar el caso ya que están aprovechando de la situación ambigua en la causa de AMIA para acusar a cualquiera que quisieran.
El atentado a la sede de Asociación Mutual Israelita Argentina, AMIA, se registró en 1994 con saldo de 85 muertos. La justicia argentina acusa a Irán de haber organizado el ataque, la acusación tajantemente rechazada por Teherán. El país persa en reiteradas ocasiones ha expresado su disposición para aclarar el caso.