Alwaght- Pese a la tregua unilateral que anunció el régimen de Riad y, al contrario de lo que alegaban los medios de comunicación saudíes respecto a la ocupación total de la ciudad de Adén, sur de Yemen, se han extendido los conflictos después de que los aviones saudíes bombardearan el aeropuerto de esta ciudad.
El aeropuerto de Adén, el más grande de Yemen, fue el domingo centro de la disputa entre el Ejército yemení, apoyado por las fuerzas del movimiento popular Ansarolá, y los milicianos de la coalición árabe, liderada por Arabia Saudí. El aeropuerto se sitúa a 50 kilómetros de la ciudad portuaria de Adén y está controlado desde hace cuatro meses por las fuerzas de Ansarolá. Desde hace dos semanas, los medios de comunicación saudíes han lanzado una campaña propagandística, alegando que las fuerzas saudíes han tomado el control del aeropuerto de Adén. No obstante, los líderes de Ansarolá han desmentido esta noticia y aseguran que todavía tienen estas instalaciones aeroportuarias bajo su control y prueba de ello es que los aviones saudíes han atacado el lugar.
El bombardeo del aeropuerto tuvo lugar después de que el régimen de Riad anunciara unilateralmente un alto el fuego de cinco días a partir de la madrugada de este lunes. Aunque Riad declaró que se trata de una tregua humanitaria con el objetivo de ayudar a los civiles afectados por la guerra, los medios de comunicación creen que esta tregua tiene sólo un objetivo; distraer la atención pública de los crímenes cometidos por los saudíes en la provincia de Taiz.
El alto al fuego fue anunciado horas después de que las correrías aéreas del régimen saudí contra una zona residencial en la ciudad de Taiz acabaran con la vida de al menos 140 civiles yemeníes. Según las fuentes médicas y de seguridad se trata del ataque más mortífero desde el inicio de la invasión saudí contra Yemen que provocó la ira del pueblo yemení y varias organizaciones internacionales.
Según un miembro de Médicos Sin Fronteras (MSF), este ataque es una muestra de que los bombardeos saudíes se centran en las casas, mercados y todos los lugares públicos, pues sigue creciendo la cifra de víctimas civiles en Yemen.
La Coalición Civil de Yemen informó el domingo que hasta el momento al menos 4210 yemeníes han muerto como resultado de la agresión saudí a Yemen.
Por su parte, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, en inglés) cifró el domingo en 365 el número de niños que han muerto a causa de la agresión saudí a Yemen, y afirmó que otros 484 han resultado heridos en este mismo periodo de tiempo.
Desde el comienzo de las agresiones el pasado 26 de marzo, el régimen saudí bombardea diariamente a Yemen en un intento por eliminar de la ecuación al movimiento popular Ansarolá y restaurar en el poder al expresidente fugitivo Abdu Rabu Mansur Hadi, un fiel aliado de Riad.
Apoyar a Al-Qaeda
Al parecer, los avatares en Adén son uno de los motivos del anuncio de esta tregua por parte de Riad. Durante los últimos días, Adén ha sido centro de conflictos entre el Ejército yemení y los elementos aliados al expresidente fugitivo Abdu Rabu Mansur Hadi y los efectivos del grupo terrorista de Al-Qaeda. En este sentido, este alto al fuego posibilita a Al-Qaeda reorganizar y recuperar sus fuerzas en Adén.
No obstante, Ansarolá no había adoptado hasta la tarde del domingo ninguna postura ante el anuncio de la tregua humanitaria.
En una entrevista realizada el viernes con Al-Mayadeen, uno de los líderes de Anarolá desmintió cualquier rumor respecto a la postura negativa del movimiento popular ante esta tregua.
Se trata del tercer alto al fuego anunciado desde la invasión saudí contra el territorio yemení. Otros dos llamados a tregua en mayo y julio, anunciados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) fueron violados por Arabia Saudí y sus aliados.