Alwaght- La entidad humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) ha informado este jueves de la muerte de al menos 6700 musulmanes rohingyas solo en el primer mes que empezó la represión del Ejército birmano contra esta minoría musulmana, el 25 de agosto.
“Extensas entrevistas revelaron que más de 6700 rohingyas fueron asesinadas durante la violencia generalizada en Myanmar. Este horrible número incluye al menos 730 niños menores de 5 años”, ha anunciado MSF en su página de Facebook.
De acuerdo con esta organización, siete de cada diez asesinatos fueron por disparos. Además ha denunciado los casos de “familias quemadas hasta la muerte en sus hogares”.
“Nos reunimos y hablamos con sobrevivientes de violencia en Myanmar, que ahora se están refugiando en campos hacinados e insalubres en Bangladés”, declaró el doctor de este organismo.
Según MSF, las heridas de bala habían sido la causa de muerte en el 69 por ciento de los casos luego de que el Ejército de Myanmar lanzara “operaciones de limpieza” en el estado occidental de Rajine.
Otro nueve por ciento se reportó quemado vivo dentro de las casas, mientras que el cinco por ciento murió de palizas mortales, según la encuesta de MSF.
Esto se produjo ya que el Ejército birmano hasta ahora ha negado las versiones generalizadas de violencia contra los rohingyas y ha dicho que solo 400 personas murieron en las primeras semanas de una nueva ola de “operaciones de seguridad” que comenzó el 25 de agosto.
Durante los últimos tres meses, las tropas gubernamentales, además de la violación, han estado cometiendo homicidios, realizando arrestos arbitrarios y ejecutando incendios masivos de casas en cientos de pueblos de los rohingyas.
Rajine, el hogar de un gran número de musulmanes rohingyas, que ha sido escenario de violencia comunal a manos de extremistas budistas desde 2012.
El Gobierno birmano niega la plena ciudadanía a la población de 1,1 millones de habitantes rohingyas y los considera como inmigrantes indocumentados de Bangladés. Sin embargo, muchos creen que los rohingyas son una comunidad de antiguo linaje en Myanmar.
