Alwaght- Arabia saudí planea ejecutar a 14 civiles chiíes tras un juicio injusto por protestas políticas, según grupos de derechos internacionales.
El aumento de las penas de muerte contra los chiíes saudíes es alarmante y sugiere que las autoridades están utilizando la pena de muerte para resolver las puntuaciones y aplastar el disentimiento bajo el pretexto de combatir el terrorismo y mantener la seguridad nacional”, declaró el martes la directora de Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) para el Oriente Medio, Sarah Leah Whitson.
Según varios documentos de la corte vistos por Amnistía Internacional (AI), un total de 38 acusados fueron detenidos y mantenidos en prisión preventiva durante más de dos años antes de que comenzara su juicio.
Durante este período de tiempo, los acusados fueron detenidos en régimen de aislamiento y sus familias no tenían ningún contacto con ellos.
“Los procedimientos judiciales falsos que llevaron a condenas a muerte... descaradamente descartaban las normas internacionales de juicios justos”, declaró Lynn Maalouf, directora adjunta de Investigación de la oficina regional de AI en Beirut, la capital de El Líbano.
Arabia Saudí llevó a cabo 153 ejecuciones en todo el país en 2016. En el más impresionante caso de ejecuciones en el año pasado, Riad ejecutó el 2 de enero al prominente clérigo chií, sheij Baqer Nimr al-Nimr, junto a otras 46 personas, desafiando las llamadas internacionales para la liberación del prominente clérigo chií y otros disidentes políticos encarcelados en el reino.