Alwaght- El Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés), entre otros organismos de derechos humanos, instó al régimen de Bahréin a poner fin al trato “cruel, inhumano y degradante” contra los presos políticos.
Una coalición de diez grupos de derechos pidieron, en un comunicado conjunto, que al régimen de Al Jalifa que tratara con todos los prisioneros con humanidad y de acuerdo con las normas de las Naciones Unidas que incluye contacto con sus familiares.
En este contexto, el subdirector de HRW para Oriente Medio, Joe Stork, declaró que estas nuevas regulaciones “degradan y humillan a los presos que claramente no representan un riesgo de escape”.
“Las autoridades pueden tomar medidas razonables para evitar escapes, pero acosar a pacientes enfermos, muchos de ellos víctimas de tortura, claramente va más allá de cualquier necesidad de seguridad”, aseveró.
De acuerdo con este comunicado, las nuevas regulaciones impuestas por Bahréin incluían el bloqueo de activistas de derechos humanos y figuras de la oposición que se llevaban a cabo en la cárcel de Jaw en la ciudad de Manama, la capital.
Husein Abdolá, director ejecutivo de la oenegé Estadounidenses para la Democracia y los Derechos Humanos en Bahréin, declaró en este comunicado que estos activistas políticos y de derechos humanos encarcelados padecían un deterioro de la salud debido a sus prolongadas detenciones arbitrarias. Además calificó de “ilegitima” encadenar a estos prisioneros.
Bahréin ha sido en reiteradas ocasiones bajo fuertes críticas de la comunidad internacional por diversas violaciones de derechos humanos en el país.
Desde 2011, Bahréin es escenario de protestas multitudinarias que exigen la salida del poder de los Al Jalifa y la liberación de los activistas presos, entre otras demandas. Muchos manifestantes han perdido la vida o han sido torturados durante las protestas antimonárquicas.