Alwaght- La policía brasileña atacó a los manifestantes frente la casa del presidente Michel Temer en la ciudad de Sao Paulo por protestar contra las medidas de austeridad del presidente.
Los agentes de la policía han tratado de dispersar a los manifestantes utilizando balas de goma y gas lacrimógeno, mientras algunos manifestantes, encapuchados, han lanzado piedras y blandido palos.
Esto se produjo después de que los sindicatos convocaron a la huelga para expresar su molestia ante los esfuerzos de Temer por aprobar medidas de austeridad en el Congreso, proyectos de ley que debilitarían las leyes laborales y endurecerían un generoso sistema de pensiones.
Además, en la ciudad de Río de Janeiro, los movilizadores prendieron fuego contra ocho autobuses de pasajeros quemados mientras la policía lanzaba gas lacrimógeno y balas de goma a manifestantes con el rostro cubierto.
A pesar de las protestas, Temer y los miembros de su Gobierno de centroderecha afirmaron que la huelga fue un fracaso. Dijeron que los sindicatos se concentraron en el transporte público para evitar que la gente que quería ir a trabajar pudiera hacerlo.
Los sindicatos dijeron que la huelga fue un éxito y apuntaron a la participación de millones de trabajadores en sectores clave como el automotor, el petrolero, las escuelas e incluso la banca. Las huelgas afectaron a los 26 estados del país y al distrito federal.
La última huelga general de Brasil ocurrió en 1996, en protesta contra las privatizaciones y reformas laborales del gobierno del presidente Fernando Henrique Cardoso.