Los agentes acaban con la vida de un sintecho porque la víctima desoyó la orden de dejar su 'arma'.
Una pelea entre indigentes en Los Ángeles terminó con la muerte de uno de ellos a manos de la Policía cuando el fallecido se negó a soltar su 'arma': un tubo metálico.
Todo comenzó en la puerta de un restaurante cuando uno de los indigentes amenazó a otro con un tubo metálico de aproximadamente un metro de extensión. Ante el alboroto generado, llegó la Policía.
De inmediato, uno de los efectivos le exigió al hombre 'armado', de unos 50 años, que dejara el tubo en el suelo y alzara las manos. Sin embargo, no solamente no obedeció el pedido, sino que se acercó a los oficiales, quienes le apuntaban con sus armas.
Sin mediar más palabras, uno de los policías le disparó en el pecho y acabó con su vida.
Pese a que la coartada oficial fue que intentaron detenerlo con una pistola táser, las imágenes filmadas por un transeúnte descartan esa historia y ratifican el crimen a quemarropa.
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