Alwaght- El ministro británico de Defensa, Michael Fallon, admitió que el Reino Unido vendió 500 bombas de racimo a Arabia Saudí en los años ochenta.
“El Reino Unido entregó 500 bombas de racimo BL755 en virtud de un acuerdo entre gobiernos firmado en 1986. La entrega final se hizo en 1989”, reza una carta de Fallon al diputado conservador Philip Hollobone.
Esto se produjo después de que varios legisladores británicos instaran al Gobierno a detener la venta de armas a Arabia Saudí hasta que termine una investigación sobre supuestas violaciones a los derechos humanos que comete en Yemen.
El pasado mes de diciembre, Fallon anunció que un “número limitado” de bombas de racimo británicas estaban siendo utilizadas por Arabia Saudí en Yemen. En el mismo mes, Riad admitió usar las armas británicas contra el pequeño país del Golfo Pérsico.
En diciembre de 2016, el diario británico The Guardian anunció que las investigaciones del Gobierno británico indicaron que Arabia Saudí utilizó bombas de racimo británicos en sus agresiones contra Yemen. Además informó que Fallon fue uno de los ministros que estaba al tanto de la investigación desde un mes anterior.
Esto se produce mientras que el Reino Unido es uno de los países firmantes de la Convención sobre municiones en racimo, el cual fue adoptado en 2008 en Dublin.
Diversas organizaciones pro derechos humanos como Amnistía Internacional (AI) y el Observatorio de los Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) han denunciado en reiteradas ocasiones a Riad por emplear bombas de racimo en sus ataques perpetrados contra el territorio yemení y han exigido el cese inmediato de tales ataques que causan daños a la población civil.
Desde el inicio de agresiones saudíes contra Yemen, en marzo de 2015, más de 4000 civiles han muerto, según las Naciones Unidas.