Al-Waght- Actualmente, parece que los siguientes factores pueden motivar a Turquía para reformular su política en Oriente Medio:
1. La verdad es que la política exterior de Turquía ha sido un fracaso respecto a las evoluciones de Siria. Las autoridades de Ankara imaginaban que con la victoria de los opositores del presidente sirio, Bashar Al-Asad, Turquía gozaría de un papel importante en el futuro de Siria pero recientemente se han dado cuenta de que han cometido un error ya que el país turco no sólo no ha alcanzado ninguno de sus objetivos originales sino que se ha enfrentado a numerosos desafíos que dan cuentan de una dura derrota en la política exterior turca en la región.
2. Los kurdos de Irak también pueden alentar al Gobierno turco para cambiar su política regional. Desde el principio de las evoluciones de Siria, Erdogan prestaba mucha atención a las actividades de los kurdos e incluso anunció que se formaría una zona segura en las fronteras norteñas de Siria. Puede decirse que dicha política también resultó en un fracaso puesto que el anuncio de la autonomía de kurdos Sirios, considerando su relación con los kurdos de Turquía y especialmente con el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (el PKK, en kurdo), por un lado puede perjudicar el proceso de resolución de la cuestión kurda y por otro intensificar las actuaciones de los kurdos en contra de Turquía en las ciudades sirias. La formación de campamentos conjuntos entre el PPK y kurdos de Siria en el norte del país árabe pueden hacer daño al futuro político de Erdogan debido a la toma de medidas incorrectas acerca de Siria. Apoyando a los opositores sirios, el presidente turco prácticamente creó un ambiente adecuado para la unión de los partidos kurdos de Turquía y de Siria. Es posible que esta decisión provoque más divergencias entre Erdogan y los partidos rivales del Gobierno turco. Entonces el presidente turco se vería obligado a cambiar su postura en Oriente Medio para controlar a los kurdos de su país.
Por último cabe añadir que cualquier movimiento del Gobierno Regional del Kurdistán (GRK) en Irak con el fin de crear un estado independiente también puede considerarse como un desafío a largo plazo para la seguridad nacional de Turquía.
3. Como tercer factor se puede mencionar las divergencias entre Turquía y Arabia Saudí debido a las evoluciones regionales especialmente las de Egipto. Después de la Primavera Árabe, Erdogan y el partido de la Justicia y el Desarrollo se han convertido en los mayores partidarios de movimientos de la Hermandad Musulmana en la región pero ahora han perdido a Egipto como el país en la que la Hermandad había asumido el mando y había sido el más poderoso movimiento en la zona. Mientras tanto, Arabia Saudí está contenta de las evoluciones egipcias y ha apoyado la eliminación de la Hermandad Musulmana. Esta disputa entre el país árabe y Turquía ha causado una brecha en el frente occidental-árabe-turco.
4. La presencia de los terroristas de ¨Estado Islámico de Irak y el Levante¨ en Irak y Siria también puede ser considerada como una amenaza para el país turco y un serio desafío para la política exterior de Turquía.
Como consecuencia, puede decirse que los puntos mencionados alientan al Gobierno de Turquía para repensar su postura regional pero debe esperar para ver si ¿Las evoluciones pasadas y los eventos futuros pueden cambiar la actual política exterior de Turquía o no? Sin duda, si el país turco sigue persiguiendo la política actual en Oriente Medio, se enfrentará a numerosos desafíos y problemas en el terreno de los asuntos de seguridad.