Alwaght- En Estados Unidos, las discrepancias políticas siguen aumentando tras la elección de Donald Trump como el futuro presidente del país, quien prometió crear zonas seguras para civiles en Siria con dinero de las monarquías árabes del Golfo Pérsico.
“Voy a hacer que los países del Golfo (Pérsico) nos den mucho dinero y vamos a ayudar a construir zonas seguras en Siria para que la gente pueda tener oportunidades”, declaró el jueves Trump ante sus partidarios en Hershey (Pensilvania).
Además señaló que Estados Unidos no tiene dinero para construir esas zonas al mismo tiempo que aseguró que las monarquías del Golfo Pérsico poseen fondos suficientes para financiar su iniciativa.
Trump pronunció estas declaraciones sobre Siria sin hacer referencia alguna a la victoria del Ejército sirio en la provincia noroccidental de Alepo.
Las tropas sirias liberaron el martes completamente la provincia de Alepo que desde 2012, está dividida; de manera que el Gobierno de Damasco controla el oeste y los grupos armados controlan el este de la urbe que desde hace varios meses están sitiados por las tropas sirias.
Tras ganar las elecciones presidenciales del pasado 8 de noviembre, Trump declaró que tiene “serias ideas” sobre la solución del conflicto sirio y abogó por cooperar con Rusia en este campo.
El magnate inmobiliario ha elogiado en reiteradas ocasiones la figura del presiente ruso, Vladimir Putin y se ha mostrado muy interesado en mejorar las relaciones de Washington con Moscú.
Esta postura de Trump ante Siria y Rusia ha provocado muchas críticas en Estados Unidos y muestra el fracaso de todas las políticas que ha adoptado el país norteamericano durante más de cinco años en Siria.