Alwaght- El portavoz del movimiento popular yemení Ansarolá, Mohamad Abdel Salam, rechazó el viernes las acusaciones saudíes de que el reciente ataque de Yemen estaba dirigido a la ciudad santa de La Meca.
De acuerdo con Abdel Salam, Arabia Saudí ha adoptado esta medida con el fin de provocar odio de los musulmanes a Ansarolá así como justificar sus agresiones contra Yemen.
Esto se produjo después de que el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG, integrado por países árabes ribereños del Golfo Pérsico), acusara a Ansarolá de intentar atacar con un misil balístico La Meca.
Abdel Salam declaró en un comunicado que Riad está lanzando una “fanfarria mediática” en la que usa los lugares santos de los musulmanes como “trinchera” política.
“La nación yemení no necesita pruebas para demostrar su identidad árabe y musulmán. Nunca se ha centrado en los lugares religiosos, y está más comprometida e interesada en preservar las santidades islámicas que los mercenarios de EEUU. Los agresores deben poner fin a sus ataques y asedio contra Yemen, abrazar la paz y observar el principio de la buena vecindad”, aseveró.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán tachó de “absurdas” acusaciones de que el Ejército yemení o Ansarolá atacaran la ciudad santa saudí de La Meca con un misil balístico.
En respuesta a los incesantes bombardeos de Arabia Saudí, las fuerzas yemeníes lanzaron el jueves el misil balístico de fabricación nacional, tipo Borkan-1 (Volcán), contra el aeropuerto de Malik Abdulaziz de Yeda, en el oeste de Arabia Saudí.
Yemen ha sido testigo de ataques aéreos de la coalición liderada por Arabia Saudí contra Yemen, desde marzo de 2015, los que tratan de socavar el movimiento popular yemení Ansarolá y restaurar al expresidente fugitivo Abdu Rabu Mansur Hadi en el poder.
Desde entonces, más de 4000 civiles han muerto como consecuencia de los incesantes ataques saudíes, según las nuevas cifras emitidas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).