Alwaght- El jefe de la Marina de EEUU, el almirante John Richardson, llamó el lunes a comandantes navales iraníes a negociar sobre los recientes ocurridos en el Golfo Pérsico.
Esto se produjo después de que el portavoz del Departamento de Defensa de EEUU (Pentágono), Jeff Davis, alegara que siete barcos del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) realizaron el pasado mes de agosto maniobras muy cerca del buque patrullero estadounidense USS Firebolt en el Golfo Pérsico, y que tres de ellos, con sus armas descubiertas, llegaron a una distancia de menos de 500 metros de la embarcación estadounidense.
Richardson afirmó que estos acontecimientos muestran la necesidad de celebrar negociaciones cercanas para acordar unas normas de comportamiento para evitar errores de cálculo de riesgo.
Además aseveró que los acuerdos de este tipo entre EEUU y Rusia y China han ayudado a reducir tales riesgos.
“Cuanto más cerca ocurren estas cosas, menor es el margen de error, y un error humano juega un papel mayor. Por ello, creo que es importante eliminar este tipo de actividades, ya que nada bueno saldrá de ahí”, argumentó.
El pasado 25 de agosto, el ministro iraní de Defensa, el general de brigada Husein Dehqan, advirtió de que Irán hará frente a todo buque extranjero que pretenda penetrar en sus aguas territoriales con intenciones “agresivas”.
La República Islámica de Irán ha afirmado en reiteradas ocasiones que su doctrina militar se fundamenta en la disuasión, y su poderío militar no representa amenaza alguna para otros países.
Cabe recordar que el pasado 12 de enero, el CGRI anunció la detención de dos lanchas militares estadounidenses con 10 marines a bordo (9 hombres y una mujer), que se habían adentrado en aguas de Irán. Al día siguiente, Irán comunicó la liberación en aguas internacionales de los marines, después de que presentaran las debidas disculpas.