Alwaght- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, declaró el miércoles tres meses de estado de emergencia tras el reciente fallido Golpe de Estado.
En una conferencia de prensa celebrada tras una reunión de su gabinete en Ankara, Erdogan subrayó que es necesario el estado de emergencia para “eliminar rápidamente” todos los elementos implicado en la intentona golpista y purgar al país de “amenazas a la democracia”.
“Esta medida no es en absoluto contra la democracia, el estado de derecho y la libertad. Por el contrario, tiene el propósito de fortalecer y proteger esos valores”, aseveró el mandatario turco.
Erdogan también repitió estas declaraciones en un discurso emitido en directo a las pantallas gigantes instaladas en numerosas plazas del país, especialmente en Estambul y Ankara, donde desde el fin de semana se congregan sus seguidores.
“Dios es grande”, gritaban decenas de miles de manifestantes, congregados en la plaza Taksim de Estambul, al elogiar el anuncio del estado de emergencia, según las fuentes estatales.
El jefe de Estado turco también instó a sus seguidores a continuar las protestas en todas las partes del país hasta nuevo aviso.
El Ministerio de Defensa de Turquía abrió el miércoles una investigación contra todos los jueces y fiscales militares, tras suspender de sus cargos a 262, en el marco de la purga que lleva a cabo el Gobierno tras el Golpe de Estado.
Igualmente el Ministerio de Educación suspendió el martes a 15200 empleados por su presunta implicación en la fallida intentona golpista contra el Gobierno de Erdogan.
El Ministerio del Interior de Turquía también despidió el lunes a 8777 funcionarios y policías, entre ellos 30 gobernadores, 52 inspectores del servicio civil y 16 asesores legales.
Al menos 290 personas murieron, entre ellas 190 civiles, y otras 1400 resultaron heridas durante el fallido Golpe de Estado llevado a cabo la noche del 15 de julio por una facción del Ejército turco, según las últimas cifras emitidas el domingo por la Cancillería turca.