Alwaght- El Secretario general de la ONU, Ban Ki_moon reiteró que el bloqueo a que el régimen de Israel desde 2007 somete a los habitantes de la Franja de Gaza es un "castigo colectivo".
Durante su viaje de despedida como el máximo responsable de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban hizo hincapié en la importancia de que las autoridades del régimen de Israel pongan fin al cerco de Gaza.
Al deplorar la devastadora situación en la que viven los ciudadanos palestinos en la asediada Franja de Gaza, Ban aseguró que "Naciones Unidos siempre estará con vosotros".
"El bloqueo a Gaza asfixia a sus residentes, destruye su economía, es un castigo colectivo" recalcó el jefe de la organización internacional.
En referencia a las consecuencias del asedio impuesto por Tel Aviv a enclave costero adujo que un 50% de la población palestina residente en Gaza no tiene empleo alguno.
A juicio del diplomático coreano la falta de esperanza entre los ciudadanos palestinos que residen en Gaza podría generar una frustración y conducir a "una escalada de los actos violentos".
"Debemos hablar abiertamente de las inaceptables dificultades que afronta el pueblo de Gaza por la humillación, la ocupación y el bloqueo, así como la división (del territorio palestino) entre esa franja y Cisjordania", acentuó.
En otra parte de sus declaraciones, Ban urgió a los palestinos a volver a un Ejecutivo unido bajo un Gobierno demócratamente elegido para que Gaza aprovecha de oportunidades de una vida nueva y con prosperidad en diferentes campos.
Desde junio de 2007, cuando el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) llegó democráticamente al poder en Gaza, el régimen de Tel Aviv ha impuesto un cerco terrestre, marítimo y aéreo al enclave costero, que impide a los residentes de la zona cubrir sus necesidades básicas.
Debido a ese bloqueo, la situación económica del territorio también se deterioró hasta un punto en que el Fondo Monetario Internacional (FMI) informó en enero de 2015 que la ofensiva del régimen israelí contra Franja de Gaza, entre julio y agosto de 2014, hizo que la economía palestina cayera en recesión por primera vez desde 2006.
El régimen de Tel Aviv, entre el 8 de julio y el 26 de agosto de 2014, perpetró una brutal ofensiva contra el enclave costero. Al menos 2310 palestinos, en su mayoría civiles, murieron y unas 11 mil viviendas, mezquitas, hospitales quedaron devastados.