Alwaght- La decisión de Egipto de ceder dos islas de Tirán y Sanafir a Arabia Saudí ha provocado diferentes reacciones en el régimen de Israel.
Algunos funcionarios israelíes consideran esa medida como una buena historia para el régimen de Israel para que pueda llegar a un acuerdo con las partes árabes sobre el intercambio de tierras.
Mientras tanto, algunos otros han declarado que esa acción de Egipto provoca que los terroristas saudíes lleguen a las fronteras de los territorios ocupados.
Según varios analistas israelíes, el régimen del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, acogió el acuerdo entre El Cairo y Riad con el fin de mostrar la buena voluntad a Egipto y dar la luz verde a Arabia Saudí, país que no tiene una relación oficial con ese régimen.
Los analistas creen que la reacción positiva del régimen de Tel Aviv ante esa cuestión muestra su esperanza en que desarrolle sus relaciones con Arabia Saudí.
Además el intercambio de tierras entre los árabes creará la oportunidad para la reconciliación entre palestinos e israelíes, según los analistas.
Egipto y Arabia Saudí firmaron un acuerdo sobre la demarcación de su frontera marítima y la entrega a Riad estos territorios de suma importancia geoestratégica en el mar Rojo, informó el sábado el Gabinete de ministros de Egipto.
Un tratado firmado en 1906 entre Gran Bretaña y el Imperio Otomano, que marcó la frontera entre Egipto y Arabia Saudí, situaba las islas en territorio egipcio; pero Arabia Saudí reclamaba la soberanía de las islas.
El reciente acuerdo aún tiene que ser aprobado por el Parlamento de Egipto, ya que ha despertado una ola de críticas en ese país.