Alwaght- Los funcionarios del Movimiento popular yemení Ansarolá se oponen a algunos capítulos de la tregua ya que se ha fijado unilateralmente.
Desde la medianoche del domingo entró en vigor un alto el fuego en Yemen, acordado entre Ansarolá y el dimitido gobierno del expresidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, un fiel aliado de Arabia Saudí.
Esto se produjo un día después de que la televisión libanesa Al-Mayadeen emitió el borrador del acuerdo de alto el fuego que incluye 20 capítulos.
Los funcionarios de Ansarolá confirmaron haber recibido ese borrador y declararon que tienen que estudiar algunos de sus capítulos.
El portavoz de Ansarolá, Mohamad Abdel Salam, afirmó que Ansarolá ha evaluado el borrador y el diálogo está continuando al respecto y todavía no se ha alcanzado un acuerdo final.
Según las evaluaciones de Ansarolá, el borrador ha intentado declarar a ese movimiento culpable y algunos de sus capítulos, como el sexto, se ha fijado unilateralmente.
“Coincidiendo con el cese de las hostilidades, Ansarolá y el Congreso Nacional de Yemen serán comprometidos con el alto el fuego mediático”, reza el capítulo 6.
Según las fuentes relacionadas, insistir en ejercer la resolución 2216 o las aprobaciones del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG-integrado por países árabes ribereños del Golfo Pérsico) se considera como una intervención en los asuntos internos de Yemen y contradicen los diálogos yemení-yemeníes.
El portavoz militar de Arabia Saudí, el general de brigada Ahmad al-Asiri, declaró que Ansarolá debe reconocer el gobierno de Mansur Hadi y entregar sus armas pesadas. Además amenazó a Yemen con la opción militar si todos los intentos resultan fracasados.
Estas amenazas se produjeron mientras que tras haber pasado más de un año de la agresión saudí contra Yemen, bajo el apoyo de EEUU, el Reino Unido y Francia, entre otros, Riad no ha logrado sus objetivos en ese país.