Alwaght- Un laboratorio austriaco anunció este sábado que no hay evidencias que confirmen que los restos encontrados en el basurero del Estado de Guerrero pertenezcan a los 43 estudiantes mexicanos desparecidos desde hace más de 18 meses.
Según esta oficina no se puede establecer perfiles genéticos mediante las pruebas de ADN.
La versión ofrecida por el gobierno sobre que los estudiantes fueron quemados ha sido rechazada por peritos extranjeros. Dicen que no hay un fuego que pueda incinerar todos los cuerpos.
El caso de los normalistas ha sido un gran revés para el gobierno. Los familiares de los desparecidos dicen que el gobierno está mintiendo y es ineficaz de resolver el caso.
El 26 de septiembre de 2014, un grupo de policías pagados por el cártel Guerreros Unidos disparó contra decenas de estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa, en Iguala, por órdenes del entonces alcalde José Luis Abarca, supuestamente para evitar que sabotearan un acto oficial.
Tras el incidente, los agentes capturaron a 43 jóvenes y los entregaron al cártel, que asegura haberlos matado e incinerado sus cuerpos en un basurero, aunque hasta la fecha solo se han identificado dos de los cadáveres.