Alwaght- El juez de EEUU que condenó recientemente a Irán a indemnizar a víctimas de los atentados del 11 de septiembre, fue quien absolvió anteriormente a Arabia Saudí de este caso.
El juez estadounidense del tribunal federal de Manhattan (Nueva York) George Daniels, condenó el miércoles a Irán pagar unos 10.500 millones de dólares por los ataques a las Torres Gemelas de Nueva York en 2001, sin presentar ninguna prueba al respecto.
El magistrado ordenó el miércoles a Irán pagar ese precio a las familias de las personas que murieron en las Torres Gemelas y en el Pentágono, en Washington, capital estadounidense, así como a un grupo de seguros.
Esto se produce mientras que Arabia Saudí fue sacada de la lista de acusados en una serie de demandas interpuestas por los familiares de las víctimas del 11S, luego de que George Daniels alegara que los abogados no han mostrado evidencia suficiente que vincule al país con los atentados terroristas, informaron el viernes las fuentes estatales.
La decisión de Daniels sobre Irán fue rara ya que entre los secuestradores que perpetraron los ataques no había ningún iraní. Para el juez, lo que hizo mal Irán fue no cumplir con las exigencias que mandaron los secuestradores de los aviones.
Según las investigaciones sobre los atentados del 11S, dirigida por la Agencia Central de Inteligencia (CIA, en inglés) junto con otros cuerpos policiales estadounidenses, 19 secuestradores que subieron a bordo de los cuatro aviones con los que perpetraron los atentados, fueron identificados; 15 de ellos eran ciudadanos de Arabia Saudí, dos de Emiratos Árabes Unidos (EAU), uno de Egipto y otro de El Líbano.
Esto ocurre mientras que Arabia Saudí sigue siendo el aliado de Estados Unidos e Irán tendrá que pagar indemnización por esos ataques, sin prueba alguna sobre dichas acusaciones.
El 11 de septiembre de 2001 un grupo de terroristas lograron tomar el control de varios aviones y los lanzaron contra las Torres Gemelas de Nueva York y el edificio del Pentágono. El cuarto aparato se estrelló en el Estado de Pensilvania. Posteriormente, el grupo terrorista Al-Qaeda reivindicó la autoría de estos atentados, en los que murieron cerca de 3000 personas.