Alwaght- El Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) interceptó el martes dos embarcaciones de EEUU que penetraron en el Golfo Pérsico y detuvieron a diez marinos que viajaba a bordo.
Las embarcaciones, con nueve hombres y una mujer a bordo, penetraron ilegalmente a las 16:30 (horas locales) de la jornada del martes en las aguas de Irán cerca de la isla de Farsi en el Golfo Pérsico y patrullaron unos dos kilómetros en la zona, según CGRI.
Los navíos estadounidenses estaban equipadas con tres ametralladoras de calibre 50: una instalada en la parte delantera y las otras dos en los laterales.
Según un portavoz del Departamento de Defensa de EEUU, el Pentágono, los buques participaban en una misión de entrenamiento cuando sufrieron fallos mecánicos que les llevaron a aguas iraníes
“Hoy temprano perdimos contacto con dos pequeñas embarcaciones de la Marina estadounidense en ruta desde Kuwait a Bahréin”, declaró el portavoz.
En este contexto, el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, mantuvo una conversación telefónica con su par iraní, Mohamad Yavad Zarif, para tratar el tema y expresó, posteriormente, su esperanza en que los militares de la Marina de EEUU sean liberados pronto.
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, calificó el martes de provocación la detención de dos embarcaciones y afirmó que había recibido garantías de que los diez marineros a bordo de las embarcaciones serán autorizados a continuar su viaje prontamente.
Por su parte, el jefe de la Oficina de Relaciones Públicas del CGRI, el general de brigada Ramezan Sharif, ha subrayado este miércoles que los marinos norteamericanos serán interrogados para determinar si dichas embarcaciones tuvieron como objetivo conseguir información de inteligencia. De ser confirmado, “sin duda se tomarán medidas”, ha añadido.
A pesar de los embargos, Irán ha conseguido grandes avances militares en los últimos años y ha progresado en todos los ámbitos, incluido defensivo.
En abril de 2015, las fuerzas de la Marina iraní abordaron un barco con bandera de las Islas Marshall en el Golfo Pérsico. El incidente se produjo en el Estrecho de Ormuz (sur de Irán), después de que el barco, con 34 tripulantes a bordo, se internara en las aguas territoriales del país persa.