Alwaght- El Ministerio de Exteriores del dimitido gobierno de Yemen declaró persona non grata al emisario del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La noticia fue conocida el jueves después de que el gobierno yemení leal al expresidente fugitivo, Abdu Rabu Mansur Hadi, acusara el jueves de parcialidad al funcionario de la entidad internacional y le solicitara a abandonar el país.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó la decisión de expulsar a su representante para los derechos humanos en ese país, Abu al Zalf, y expresó su preocupación por la seguridad del resto del personal que trabajaba en su oficina. De mismo modo, pidió al dimitido gobierno de Hadi que reconsiderara su decisión.
“El secretario general subraya que el personal de las Naciones Unidas nunca debe ser amenazado ni sancionado por realizar su trabajo, que están basado en la Carta de las Naciones Unidas”, reza un comunicado emitido el jueves por Stephane Dujarric, vocero del secretario general, Ban Ki-moon.
Tras subrayar que el pueblo yemení ha sufrido graves violaciones de los derechos humanos, el comunicado indica que la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACDH) trata de documentar estas violaciones y promover y proteger los derechos fundamentales de la población.
El pasado marzo, Arabia Saudí emprendió una agresión militar contra Yemen, sin el aval de ONU pero con luz verde de Estados Unidos, en un intento por eliminar de la esfera política al movimiento popular yemení Ansarolá y restaurar en el poder a Abdu Rabu Mansur Hadi, fiel aliado de Riad.
Según las últimas estadísticas de las Naciones Unidas, esta guerra ya ha dejado más de 32.000 víctimas, entre muertos y heridos, en su mayoría civiles.