Rusia tiene muchos objetivos internos y regionales en su interés por solucionar la crisis siria. Parece que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha enviado a sus fuerzas militares a la ciudad portuaria de Latakia, noroeste de Siria, con el fin de controlar los planes de EEUU en el país árabe y también obligar a Washington a colaborar con Moscú para resolver esta crisis.
Las autoridades rusas, argumentado el fracaso de la coalición anti-Daesh, liderada por EEUU, justifican su presencia en Siria para luchar contra el terrorismo y preparar el terreno político para resolver la crisis siria. Entonces, las acciones de Moscú en Siria no solo no deben preocupar a los estadounidenses, sino que deben apoyarlas.
Los analistas creen que Rusia ha considerado todos los aspectos para entrar en Siria y ha preparado los terrenos legítimo y diplomático para incrementar sus actividades militares en este país árabe y, por eso, EEUU se ve obligado a colaborar con Moscú para solucionar esta crisis.
En este sentido, la lucha contra el terrorismo, la demanda del Gobierno sirio y los acuerdos de defensa firmados entre Rusia y Siria son las razones que han preparado el terreno legítimo para la presencia de los rusos en el país árabe. En el plano diplomático, los rusos, durante los últimos meses, se han reunido con las autoridades diplomáticas y de seguridad de los países regionales, como Irán, Arabia Saudí, Egipto y Jordania, para hablar sobre sus planes en Siria.
Desde el aspecto militar y de acuerdo con los informes de medios de comunicación estadounidenses, la presencia de Rusia en Siria es un acto coordinando con Irán. Fox News escribió al respecto: “Las autoridades rusas e iraníes han discutido un plan militar conjunto para fortalecer el Gobierno de Bashar Al-Asad, el presidente sirio”. Según esta agencia de noticias, la construcción de la base militar rusa en Latakia forma parte del acuerdo de Putin con las autoridades iraníes.
Los funcionarios iraníes también han confirmado el plan conjunto de Moscú y Teherán. El mayor general Seyed Yahya Safavi, asistente y asesor del líder de la Revolución Islámica de Irán, declaró en su discurso previo a los sermones del viernes de Teherán: “La Federación Rusa ha disfrutado de mejores relaciones políticas con Irán durante los últimos 14 años y después de la acción militar de Estados Unidos en Afganistán (…) Actualmente, Rusia mantiene coordinaciones con Irán respecto a algunos asuntos regionales como la crisis siria”.
El comandante iraní también afirmó: “La República Islámica de Irán, Rusia y el Movimiento de Resistencia de El Líbano (Hezbolá) apoyan al pueblo y al Gobierno sirios y proporcionan asesoramiento militar al eje de la resistencia”. Es obvio que la coordinación de Rusia con los principales actores de la resistencia en Siria, que están totalmente familiarizados con las evoluciones del campo de batalla, puede aumentar la seguridad de los militares rusos.
Las medidas de Moscú, a nivel político y de seguridad, han causado que los estadounidenses acepten la presencia militar de Rusia en Siria. En tal condición, los rusos propusieron conversar sobre los asuntos militares de Damasco para alentar a los estadounidenses a cooperar con el proyecto.
John Kerry, secretario de Estado de EEUU, anunció el pasado miércoles que está estudiando la solicitud de las autoridades rusas para dialogar sobre los aspectos militares de la crisis siria. Teniendo en cuenta los riesgos de la presencia simultánea de ambos países en Siria, los funcionarios rusos han pedido las conversaciones militares a fin de que Rusia y EEUU entiendan claramente los objetivos de cada uno, declaró Kerry.
Todavía la respuesta de EEUU a la petición rusa no está clara. Lo cierto es que los estadounidenses deben cooperar con Rusia mientras que la presencia de Moscú en Siria ha sido coordinada con Irán, país que juega un papel importante en la prevención de los objetivos y programas de Estados Unidos en este país en crisis desde hace más de cuatro años.