Alwaght- En momentos en que los combatientes de Hezbolá y las fuerzas del Ejército de Siria están en la última parte de sus operaciones para retomar Al-Zabadani, el régimen de Israel apunta contra las posiciones de las fuerzas de Resistencia en la región de los altos de Golán, acto que puede considerarse como una ayuda a los terroristas cercados en la mencionada ciudad y una tentativa por parte de Tel Aviv para intervenir directamente en los conflictos acaecidos en el sur de Siria.
El pasado jueves el régimen de Israel lanzó varios ataques a las fronteras sureñas de Siria. Un grupo cercano al opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) y funcionarios militares israelíes declararon que el régimen de Tel Aviv realizó ataques de represalia contra los avances del Ejército sirio en los altos de Golán. Las autoridades israelíes alegan que la operación se llevó a cabo en respuesta a los misiles lanzados desde el suelo sirio hacia la parte norteña de los altos de Golán, ocupada por el régimen de Israel. Según el comunicado del ejército israelí, los misiles que apuntaron el norte de Al-Yalil (Galilea) fueron lanzados "por parte de las posiciones de Siria en los altos de Golán" y "los extremistas islámicos apoyados por Irán".
Este alegato de los sionistas se produce mientras que ningún grupo ligado a Irán se ha atribuido la autoría de los ataques, además, los analistas tachan de "ilógico" el lanzamiento de misiles por los grupos de Resistencia en la situación actual y consideran que la ofensiva fue operado por las bandas terroristas takfiríes para luego convertirla en una excusa que justifique la intervención directa del régimen de Israel en el campo de batalla de Siria. Por tanto, el viernes, el ejército israelí apuntó las posiciones de las fuerzas de Resistencia en el sur de Siria.
Mientras tanto, no es la primera vez que el régimen de Tel Aviv realiza una operación militar, de manera directa, en el territorio sirio. Con fecha anterior, el ejército israelí, en apoyo a los integrantes del Frente Al-Nusra, vinculado de Al-Qaeda en Siria, efectuó ofensivas en la región limítrofe de Quneitra, no obstante, los ataques acaecidos en los recientes dos días no tienen precedentes desde el inicio de la crisis siria, en marzo de 2011.
Al parecer, el régimen de Israel ha decidido intensificar su papel directo debido a las evoluciones sobre la ciudad estratégica de Al-Zabadani, en noroeste de Damasco. Las fuerzas de Resistencia han empezado la operación para retomar esta urbe el pasado mes de julio y por aquel entonces la alarma sonó en Tel Aviv.
La parte sureña de Al-Zabadani está localizada a 30 kilómetros de la línea de alto el fuego, determinado por la ONU en las montañas de Golán, y es considerada la puerta de entrada de Qalamun, de la carretera Damasco – Beirut, de las laderas de Jabal al-Sheikh y por fin de Quneitra. Podría decirse que el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) realizó la operación de Al-Zabadani con el fin de avanzar hacia los jardines de Shaaba, situado cerca de Quneitra.
En este caso, la inteligencia militar de Israel no solo tiene que hacer frente a las fuerzas de Hezbolá en las partes norteñas de los territorios ocupados sino que debe tolerar la fuerte y creciente presencia de las fuerzas de Resistencia en la parte oriental, lo que se considera un gran desafío para los sionistas.
Según lo previsto, el régimen de Israel, para evitar la liberación de Al-Zabadani ha tomado medidas preventivas, no obstante, no se sabe hasta cuándo va a continuar con sus ofensivas. Ilia J. Maqnayer, una analista de los asuntos regionales, escribió que los aliados de Siria consideran los ataques recientes un poco raros así que Hezbolá ha puesto en estado de alerta máxima a sus fuerzas. En esta situación, existe la posibilidad de un enfrentamiento directo entre las fuerzas de Resistencia y el régimen de Israel, pero es improbable que este choque se convierta en una guerra.