Según los partidarios de Abdu Rabu Mansur Hadi, los refuerzos saudíes y emiratos les ayudaron en una ofensiva contra la estratégica base militar, Al-Anad en la provincia suroccidental de Lahij.
Las milicias leales a expresidente yemení alegaron que ellos han tomado el control la base. Por otra parte, los combatientes de Ansarolá y sus aliados dicen que han repelido el ataque y mantenido el control de la base aérea, situada al norte de la estratégica ciudad portuaria de Adén.
Arabia Saudí ha desplegado a 1.500 fuerzas en el sur de Yemen para luchar contra las fuerzas de Ansarolá y de los Comités Populares, señalando que la mayor parte de las fuerzas desplegadas eran de los Emiratos Árabes Unidos y habían entrado en la provincia de Adén, situada en el sur de Yemen, a través del puerto Al-Buraiqeh, según el periódico de Londres Al-Hayat.
Al-Hayat también informó que Riad ha trasladado equipo militar pesado, como tanques, transporte blindado de personal y vehículos armados para los partidarios de Hadi.
El régimen saudí lanzó su agresión militar contra Yemen -sin un mandato de las Naciones Unidas- para socavar el movimiento popular Ansarolá y restaurar la energía a Hadi, un aliado de Riad.
De acuerdo con cifras de la ONU, la guerra saudí se ha cobrado la vida de cerca de 1.900 civiles desde 26 de marzo de 2015.
