Alwaght- Los elementos componentes de la habilidad y los patrones de comportamiento de los actores en las relaciones internacionales dependen de la naturaleza de sus objetivos determinados y también de su posición interna y externa.
Estados Unidos, a la hora de definir su comportamiento internacional y elegir un patrón para su política exterior, ha recurrido siempre a adoptar métodos basados en la estructura interior, sistema internacional, patrones de pensamiento y las condiciones geopolíticas.
En este sentido, durante la Guerra Fría, en el que reinaba un sistema bipolar, los políticos para proveer la seguridad nacional se vieron obligados a tomar medidas que minimicen los desafíos del grupo rival.
Tras la disolución de la Unión Soviética en 1991, EEUU se hizo con una buena posición en el sistema internacional de la década 90, lo que permitió que extienda el área de sus intereses mediante su patrón intervencionista, mientras que obligaba a otros implicados a obedecer de sus patrones.
En otras palabras, el Gobierno de Washington, adoptando este método, buscaba desempeñar el papel de policía en el ámbito internacional. Así que, tras la desintegración de la Unión Soviética, se vio como la única superpotencia existente en el mundo, por lo que empezó a divulgar nuevas teorías. De hecho, la disolución de la Unión Soviética dejó un extenso espacio geográfico para la expansión del llamado patrón norteamericano "Liberalismo Económico".
Entre otros partidarios de este patrón, figura el nombre de Francis Fukuyama, un politólogo estadounidense de origen japonés, que ante el fracaso del régimen comunista, identificaba al Liberalismo como la única opción viable para la economía del mundo.
Por otra parte, otros científicos como Samuel P. Huntington, profesor de Ciencia Política de la Universidad de Harvard y miembro del Consejo de Seguridad Nacional durante la presidencia del democrática Jimmy Carter, discutieron y criticaron el sistema democrático del país norteamericano.
Todas estas teorías autorizaban al Gobierno de Washington a impedir a otros países acceso, control y utilización de cualquier recurso natural que pudiera hacer viable que se conviertan en entes poderosos. De igual manera trató de neutralizar cualquier intento que buscaba desafiar el liderazgo de Washington en el concierto de las naciones.
Para mantener esa hegemonía a nivel mundial, Washington debería cumplir con tres objetivos:
1. Afrontar cualquier poderío que tenía la intención de dominar los recursos naturales para luego convertirse en una superpotencia mundial.
2. Neutralizar intentos de países avanzados e industrializados que tenían como objetivo desafiar el liderazgo de Washington y perturbar el sistema económico y político de esa época.
3. Tratar de evitar la aparición de cualquier rival a nivel mundial.
No obstante, los estadounidenses no sabían que los avatares internacionales cuentan con una integración genética, pese a las diferencias que hay en su valor y su estructura. Así que, la hegemonía estadounidense se vio afectada seriamente, de tal manera que ya no podía mantener su firmeza como antes. La aparición de numerosas crisis dentro del sistema liderado por EEUU, no solo ha debilitado el mismo sistema, sino ha cuestionado prácticamente la hegemonía y el poderío del Estado norteamericano.
Como consecuencia, Washington que soñaba con presentar su liderazgo hegemónico como un deber internacional y una responsabilidad mundial, se vio afectado por un desgaste hegemónico, aunque en un periodo de tiempo se hizo con grandes concesiones:
1. Desde el punto de vista económico, la crisis mundial que inició desde el año 2008, ha cuestionado el papel de EEUU como el único polo financiero del mundo y ha infligido grandes daños a la estructura del sistema unipolar. En realidad, la crisis mundial se interpreta como la derrota del neoliberalismo y de los que negaban el papel regulador de los gobiernos en la economía, pues sostenían la idea de que el mismo mercado solucionaría todos los asuntos relevantes al desarrollo económico. Los erróneos principios del capitalismo que fundaron las bases de la crisis en EEUU y otros países del mundo, ahora evidencian el fin de la época del neoliberalismo en todo el mundo, pues los gobiernos que abogaban por la no intervención del gobierno en los asuntos económicos, se han visto obligados a intervenir y con toda fuerza en lo referente a los asuntos financieros.
2. Desde el punto de vista estratégico, la decadencia de la hegemonía de Estados Unidos se debe principalmente a las decisiones que ha tomado Washington en lo referente a los asuntos mundiales. Como ejemplo, es digno de mencionar las crisis de Siria y Ucrania, donde se nota la intervención directa del país norteamericano desde el principio hasta el momento. Respecto a Siria, los estadounidenses pretendían dominar el Oriente Medio tras destituir al presidente sirio, Bashar al-Asad, y acabar con la influencia de la República Islámica en el país árabe, no obstante, el paso de tiempo puso de relieve que han fracasado.
La misma situación fue registrada en Ucrania, porque el Gobierno de Washington creía que la caída del gobierno de Yanukovich, adecuaría las condiciones para que Ucrania se una a la Unión Europea (UE) y luego formara parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Pero la situación se invirtió a favor de Rusia después de que Moscú tomara medidas con el objetivo de neutralizar todas las tácticas estratégicas de Washington en Ucrania.
Como consecuencia, Siria y Ucrania se han convertido en un laberinto para EEUU y sus aliados occidentales.