Dicha fuente señaló que los comandantes abrieron el paso a través de la parte occidental de la ciudad de Ramadi - la capital de la conflictiva provincia occidental de Al-Anbar - a Siria y luego entraron en Turquía.
El gobierno del presidente actual turco, Recep Tayyip Erdoğan, ha sido acusado de ser uno de los principales partidarios de los grupos terroristas takfirí que operan en Siria, pues, según informes, Ankara entrena activamente y provee armas a los grupos terroristas en Siria, y también facilita el paso seguro de ellos.
El 12 de junio, el diario turco Today’s Zaman reveló que el gobierno de Ankara permite a los terroristas del grupo Daesh a caminar libremente por las calles del distrito fronterizo Akcakale ubicado en la provincia suroriental de Şanlıurfa.
Cabe mencionar que la oposición turca lleva meses acusando al Gobierno turco de permitir la entrada de terroristas de Turquía a Siria.
El 13 de julio, las autoridades iraquíes anunciaron el inicio de una gran ofensiva contra el Daesh para liberar a Al-Anbar, con la demanda del primer ministro iraquí, Haider Al-Abadi.
Grandes partes del norte y el oeste de Irak han estado plagadas por la violencia desde cuando el grupo terrorista Daesh comenzó su marcha en el territorio iraquí en junio de 2014.