Las sanciones fueron declaradas el martes por el Subsecretario para Terrorismo e Inteligencia Financiera del Departamento del Tesoro de EEUU, Adam Szubin.
"Estas sanciones lo dejan claro, Estados Unidos continuará persiguiendo activamente a Hezbolá por sus actividades terroristas en todo el mundo, así como por su continuo apoyo en la despiadada campaña militar del (presidente sirio Bashar) Al-Assad en Siria", advirtió Szubin.
Siria se ha convertido en una presa de la violencia mortífera desde 2011. Estados Unidos y algunos de sus aliados regionales - especialmente Qatar, Arabia Saudí y Turquía – han estado apoyando a los terroristas que operan en Siria.
Según las cifras de Naciones Unidas, más de 230.000 personas perdieron la vida y millones fueron desplazadas debido a la confusión que se ha apoderado de Siria durante más de cuatro años.
Las sanciones se produjeron como soldados del Ejército sirio y los combatientes de Hezbolá han establecido un control total sobre algunas áreas estratégicas en las afueras de la ciudad fronteriza siria de Zabadani.
El mes pasado, el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos tomó medidas contra empresas e individuos sospechosos que facilitan las acciones de Hezbolá.
Hezbolá fue fundada en la década de 1980 a raíz de la invasión y ocupación israelí del sur de El Líbano.
El movimiento de resistencia libanesa emprendió una campaña de resistencia contra las tropas sionistas y les empujó fuera del sur del Líbano en mayo de 2000.
Hezbolá también ha apoyado el Ejército sirio en la lucha contra los terroristas patrocinados por extranjeros que han estado causando estragos en el país árabe desde marzo de 2011.