La existencia del régimen sionista, igual que el surgimiento de Daesh durante los últimos años, es caracterizada por un alto nivel de violencia y crímenes contra el pueblo palestino y los árabes. Las numerosas matanzas que ha cometido este régimen en sus violaciones contra los territorios palestino y libanés, han servido de un buen patrón para EIIL.
En poco tiempo, desde su aparición, esta lacra (Daesh) ha cometido atrocidades de la peor envergadura, entre ellas, degollar, decapitar y enterrar a gente viva solamente por su tendencia religiosa. Tanto el régimen de Israel como EIIL se esconden detrás de argumentos racistas y religiosas para justificar sus atrocidades que han dejado a miles de personas desplazadas. A su juicio, los creyentes de otras religiones son en su mayoría malos, paganos y politeístas, por tanto, solo algunos tienen derecho a vivir.
Bajo tales excusas, los sionistas han redactado y publicado numerosos libros con el objetivo de justificar su radicalismo y allanar así el camino para sus objetivos expansionistas.
En cuanto al territorio iraquí, el régimen de Tel Aviv, desde la ocupación de Irak por EE.UU., soñaba con dominar a aquellas zonas que actualmente se encuentran bajo el control de Daesh. Para tal fin, los elementos de la agencia de espionaje israelí (Mossad) se trasladaron a la zona, su objetivo principal: desestabilizar e intensificar las discrepancias entre las tribus del país árabe. En otras palabras, Daesh con la ideología takfirí es la otra cara de la moneda de Israel con ideología sionista que toman como excusa el fanatismo religioso para matar y cometer crímenes. Por tanto, resulta que las medidas de Daesh y el régimen de Israel emanan de enfoques semejantes. Abajo estudiamos varias similitudes entre el grupo terrorista y el régimen sionista:
Similitudes ideológicas
Confiscación favorable de la educación religiosa:
Como la interacción de los sionistas con el judaísmo, los elementos takfiríes de Daesh han separado las partes de la religión que están a favor de sus políticas expansionistas, mientras niegan el resto.
Enfoque maquiavelístico: El fin justifica los medios: las creencias de ambas corrientes terroristas se basa en este principio, el fin justifica los medios.
Creer en principios racistas:
Tanto el Daeshismo como el sionismo creen que ellos pertenecen a una única secta superior. A juicio de los sionistas, los no judíos son solamente animales que son creados para servirles.
Intentar a atraer diversas sectas a los territorios ocupados:
Con el objetivo de crear comunidades dentro de los territorios que han ocupado, el régimen de Israel y la banda terrorista de EIIL (Daesh) invitan a otras sectas a aceptar su ideología. En realidad, una de las similitudes entre el régimen de Israel y el grupo terrorista de Daesh es esta: los dos están compuestos por miembros de distintas razas, sectas y naciones.
Similitudes estratégicas y operativas
La estrategia de dominar una zona y divulgar las ideas:
Con esta estrategia el régimen sionista ocupó el territorio palestino y promulgó la ideología de "tierra santa", una técnica que han utilizado a su favor los takfiríes en la ocupación del territorio iraquí.
Aprovechar de instrumentos propagandísticos:
La propaganda es uno de los preámbulos principales de los 24 protocolos de Sion que fue aprobado hace 200 años por los fundadores del judaísmo radical (sionismo) y hoy sirve a los integrantes takfiríes de Daesh como un truco principal.
Matanza de civiles:
El ejército del régimen israelí mata de manera indiscriminada a los ciudadanos palestinos, una tragedia que se repite diariamente dentro de los territorios que ha ocupado Daesh en Irak y Siria.
Detención de los detractores:
Cualquiera que se oponga con políticas expansionistas de Tel Aviv será detenido y llevado a un paradero desconocido de forma administrativa, mientras que le privan de sus derechos principales.
Teniendo en cuenta todos estos, se pone de manifiesto las similitudes existentes entre el régimen de Israel y Daesh, en otras palabras, Israel, como un estado judío ejerce como una base militar y de mercenarios, tiene como objetivo suministrar los intereses de sus aliados occidentales en la rica región del Oriente Medio, y gracias a su posición estratégica intenta endurecer las discrepancias regionales y conflictos sectarias en el mundo árabe.
Por su parte, el grupo terrorista EIIL (Daesh), recurriendo a la limpieza étnica y con la implementación de la violencia, trata de obtener sus propios intereses. No obstante, las naciones de la región conocen bien la naturaleza de este tipo de grupúsculos, y como consecuencia no se percibe un buen panorama para ambos.