Según informó la cadena de televisión rusa RT citando a un portavoz del Ministerio de Defensa británico, las asistencias a Arabia Saudí incluyen el envío de armas guiadas de precisión y el soporte técnico.
El portavoz británico cuyo nombre no se ha indicado en el informe, subrayó que las autoridades de Londres habían asegurado que “Estos armamentos se utilizan por la fuerza aérea de Arabia Saudí, en cumplimiento de las normas internacionales.”
Esto mientras, los activistas de los organismos anti-armas recientemente han acusado al gobierno británico de apoyar una guerra reconocida ilegal por los expertos de derecho internacional.
"El bombardeo de Arabia Saudita ha generado una catástrofe humanitaria y ahora sabemos que las armas de Reino Unido han contribuido a hacerlo", dijo Andrew Smith de la Campaña contra el Comercio de Armas (CAAT, en inglés).
Lamentó Smith que, “el Gobierno británico con estas actuaciones, está enviando el mensaje de que los derechos humanos y la democracia son menos importantes que la venta de armas".
Según las informaciones de CAAT, Arabia Saudí es el mayor cliente de armas del Reino Unido.
No en vano que sigue dejando más victimas la ofensiva aérea de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí y apoyada indirectamente por el Reino Unido en Yemen, ya que de acuerdo a las estimaciones de la ONU, en este conflicto, han muerto unas 2.288 personas (la mitad de las cuales eran civiles) y alrededor de 10 mil han resultado heridas.
