Alwaght- El expresidente yemení, Ali Abdolá Saleh ha muerto hoy tras recibir varios disparos mientras huía de la ciudad de Saná hacia Marib.
El Ministerio yemení del Interior ha confirmado en un comunicado la muerte de Saleh, sin embargo, fuentes cercanas al expresidente negaron su fallecimiento. En el comunicado, el Ministerio indica que con la muerte de Saleh el conflicto en Saná ya ha terminado y que el exmandatario “estaba creando caos al trabajar junto con las milicias agresoras”.
Su partido político, Congreso Popular, lo ha desmentido y ha precisado que Saleh se encuentra dirigiendo las escaramuzas contra quienes hasta la semana pasada eran sus aliados en el polvorín de Yemen, la nación más pobre del golfo Pérsico.
Tras el incidente, la coalición dirigida por Arabia Saudí ha advertido a los yemeníes distanciarse unos 500 metros de las instalaciones del movimiento popular Ansarolá y las del Ejército yemení en la ciudad capitalina. Esto puede significar que el régimen saudí se prepara a intensificar los ataques aéreos en Saná.
Este anuncio ocurre tras la ruptura de la alianza entre el movimiento popular Ansarolá y Ali Abdolá Saleh que se distanció de la alianza de gobierno con Ansarolá hasta que el domingo formalmente se desmarcó de esta.
Arabia Saudí ha promovido las tensiones con el fin de acabar con la unión entre los partidarios de Ali Abdulá Saleh y Ansarolá, con el objetivo de debilitar el frente de resistencia contra Riad.
Esta unidad entre diferentes facciones yemeníes ha sido el motivo del fracaso de las operaciones saudíes en Yemen. Riad inició una atroz agresión contra este país vecino en 2015 para restaurar en el poder al fugado presidente Abdu Rabu Mansur Hadi.