Alwaght- La oposición a la influencia de Irán en la región de Oriente Medio, es el punto común entre el régimen de Israel y Arabia Saudí.
Así lo indicó el viernes la revista estadounidense Bloomberg al mismo tiempo que añadió que esta cuestión ha provocado una alianza entre el primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu y el príncipe heredero saudí, Mohamad bin Salman además del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
De acuerdo con esta revista, Netanyahu, Bin Salman y Trump han expresado su preocupación por la victoria del presidente sirio, Bashar al-Asad y su aliado Irán en Siria, lo que aumentará la influencia de Teherán en la región.
Estos tres líderes buscaron otro camino para aislar a Irán, por lo tanto se han centrado en El Líbano y el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), calificado de “terrorista” por los saudíes, israelíes y estadounidenses.
Pese a todas las posturas comunes entre Arabia Saudí y el régimen de Israel contra Irán, ninguna de las partes han confirmado esta cuestión directamente, ya que pude tener consecuencias negativas, especialmente para Riad.
Esto se produce mientras que el papel de Washington en coordinaciones entre saudíes e israelíes no está claro y los expertos en la política exterior de Estados Unidos en la región dicen que Estados Unidos tiene como objetivo suscitar a sus aliados para cooperar y actuar contra Irán.
Esto se produjo después de que Hariri anunciara el pasado 4 de noviembre su renuncia a través de una declaración televisiva desde Arabia Saudí, citando temores sobre su vida y acusando a Irán y a Hezbolá de interferir en asuntos internos de los países árabes.
Tras su renuncia, Netanyahu declaró que la decisión de Hariri es una llamada de atención a la comunidad internacional para actuar contra Irán y su “agresión”.