Alwaght- Tras unos días de duros enfrentamientos en Bahréin, el Ministerio del Interior ha advertido sobre cualquiera congregación y manifestación de los ciudadanos bahreiníes, especialmente en la aldea de Diraz, oeste de Manama, la capital.
El jefe de seguridad pública de Bahréin, Tariq Hasan al-Hasan, ha alegado que Diraz se ha convertido en un escondite para los opositores y ha añadido que las fuerzas de seguridad bahreiníes se enfrentarán a cualquiera congregación ilegal y llamadas provocativas.
Además ha alegado que ninguna orden ha sido emitida para el arresto militar del máximo clérigo chií, el sheij Isa Ahmad Qasem, ni para ejercer el fallo de presión en su contra.
En otras partes de sus alegaciones, Al-Hasan anunció que las fuerzas de seguridad han entrado en Diraz para arrestar a algunos de los manifestantes y no han atacado al sheij Qasem.
Esto se produjo horas después de que los clérigos bahreiníes declararon en un comunicado que tras el ataques de las fuerzas del régimen de Al Jalifa a la casa del sheij Qasem, no hay ninguna información al respecto.
De acuerdo con las fuentes locales, se han cortado todas las comunicaciones y no hay informes sobres el sheij Qasem y su familia.
Las fuerzas del régimen de Al Jalifa atacaron el martes la casa del prominente clérigo chií en Diraz, donde mataron al menos cinco de los manifestantes y dejaron 286 heridos.
Todo esto se produjo después de que un tribunal de Bahréin condenara el domingo al sheij Qasem, a un año de cárcel y le ordenó pagar una multa de 100 mil dinares bahreiníes (más de 265 mil dólares). La corte bahreiní además decidió confiscar las propiedades del prominente clérigo por un valor de 3 millones de dinares bahreiníes (casi 8 millones de dólares) y dos de sus casas.
El 20 de junio de 2016, el Ministerio del Interior de Bahréin informó de la revocación de la ciudadanía al sheij Qasem, al acusarlo de ser involucrado activamente en “crear un ámbito sectario” a través de contactos con poderes extranjeros, entre otros cargos.
Desde entonces se han registrado manifestaciones a diario en diferentes partes del reino árabe. Varias protestas y sentadas también han sido celebradas en la aldea de Diraz.