Tzvetan Tódorov, filósofo francés de origen húngaro, ha fallecido en París este martes, según ha informado Joan Tarrida, su editor en españa.
El pensador, que fue Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 2008, fue uno de los intelectuales más reconocidos en el mundo. Filósofo, lingüista, sociólogo, historiador, crítico y teórico literario, Tódorov (Sofía, 1939), era un destacado teórico de la literatura e historiador de las ideas, así como analista de la cultura.
Fue autor de títulos como La teoría de la literatura de los formalistas rusos (1965); La conquista de América (1984), su primera investigación sobre la alteridad; Frente al límite (1991), sobre los campos de concentración; o Los abusos de la memoria (2009).
Historia, pintura, literatura...
Considerado uno de los mayores intelectuales de nuestro tiempo, impartió clases en la Ecole Pratique des Hautes Etudes y en la Universidad de Yale, y sus lecciones magistrales se han escuchado también en las universidades de Nueva York, Columbia, Harvard y California.
Desde 1987 dirigió el Centro de Investigaciones sobre las Artes y el Lenguaje del Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS), tal y como recoge la editorial del autor en España, Galaxia Gutenberg. Entre otros reconocimientos, fue distinguido con la medalla de la Orden de las Artes y de las Letras en Francia y el premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2008.
Todorov tuvo que esperar hasta la caída del Muro para abordar su experiencia como ciudadano de un estado totalitario y, para ello, se centró en su faceta como historiador a partir de los años noventa.
Dentro de esta disciplina, destaca su obra El hombre desplazado (2008), una autobiografía en la que reflexiona sobre el fin del comunismo, su experiencia con el totalitarismo y los campos de concentración y el aprendizaje de la democracia.
Durante su carrera, publicó diversos trabajos, entre los que figuran Mijail Bajtín: el principio dialógico (1981), Las morales de la historia (1991), Elogio del individuo. Ensayo sobre la pintura flamenca (2006) y El espíritu de la Ilustración (2008).
Todorov también dedicó una faceta importante de su obra al estudio de la pintura y a como ésta refleja los cambios en el pensamiento y en los valores de las sociedades europeas y participa en ellos. Entre sus obras, también dedicó espacio al maestro de la pintura Goya.
rtve