Alwaght- El subsecretario general de Asuntos Humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Stephen O'Brien, ha advertido este jueves que Alepo está a punto de convertirse en un gigantesco cementerio.
O'Brien en una intervención por videoconferencia ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha pedido a todas las partes en conflicto y a aquellos con influencia sobre ellas que hagan todo lo que esté en sus manos para proteger a los civiles y la entrada de ayuda humanitaria en Alepo oriental antes de que se convierta en un gigantesco cementerio.
"Durante cinco años, Naciones Unidas y el resto de la comunidad humanitaria ha dado la voz de alarma sobre el devastador impacto de la guerra siria en millones de hombres, mujeres y niños (...) Hemos pedido al Consejo de Seguridad que se una para garantizar la protección de la población y las infraestructuras civiles (...) Pero nuestras demandas han sido largamente ignoradas", ha subrayado.
Asimismo ha añadido que desde el fin de semana 25.000 personas se han visto obligadas a huir de sus hogares en la zona este de Alepo (bajo control de terroristas).
En esta línea ha indicado que los terroristas están impidiendo la salida de la población civil de las zonas controladas por ellos.
Por su lado, el embajador sirio ante las Naciones Unidas, Bashar al-Yafari, al denunciar el apoyo de Arabia Saudí, Turquía y Catar a los terroristas, ha asegurado que el terrorismo no puede ser una herramienta para convertir a Alepo a en otra Kandahar (ciudad afgana)