Alwaght- El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, subrayó que el Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) es un instrumento para establecer la seguridad y el poder en el mundo islámico.
El canciller iraní pronunció estas declaraciones durante la Conferencia Internacional sobre las Crisis Geopolíticas del Mundo Islámico, celebrada el lunes en Teherán, capital persa, donde insistió en unirse ante los desafíos internos y externos que enfrenta el mundo musulmán.
Al destacar el poder militar de Hezbolá, Zarif calificó al régimen de Israel como el principal problema que enfrenta el mundo islámico y llamó a los países musulmanes a unirse ante este régimen.
“Los Estados musulmanes deben responder a las violaciones de los derechos del pueblo palestino por el régimen sionista”, aseveró el jefe de la Diplomacia iraní en esta conferencia.
Además afirmó que los países musulmanes no han logrado unirse para dar la respuesta necesaria al régimen de Tel Aviv debido a los obstáculos que dificultan una interactuación constructiva entre ellos.
Zarif también señaló que las autoridades de varios países islámicos han tratado de encubrir el principal problema del Islam al realizar amenazas falsas como la discordia entre chiíes y suníes así como árabes y persas.
En otras partes de sus declaraciones también llamó a todos los Estados islámicos a impedir que el extremismo “se convierta en un reto sustantivo y en una amenaza limitada a los contornos geográficos de Siria, Yemen, Irak y el mundo musulmán, sino ampliada a toda la humanidad”.
Arabia Saudí, Catar y Turquía, entre otros, han estado reforzando grupos terroristas que luchan contra gobiernos legítimos en la región de Oriente Medio para impulsar sus ambiciones políticas, una medida que ha provocado la proliferación de bandas terroristas, entre otros.