Alwaght- La candidata presidencial demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, tuvo que abandonar el acto de conmemoración al 11-S en Nueva York tras sentirse mal de salud. Sufre de la neumonía, un tipo de infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones. Alwaght ha entrevistado a la destacada analista chilena, Francisca Quiroga, para analizar cómo afectaría esta enfermedad de Clinton su campaña electoral.
Alwaght: ¿Cuál sería el futuro de la competición y la carrera electoral en EEUU tras la revelación de la enfermedad de Clinton?
Quiroga: El escenario electoral actual muestra una competencia muy estrecha entre los dos candidatos que ganaron las respectivas primarias de sus partidos. En el caso de Hillary Clinton enfrenta una situación dual: las divisiones internas del partido demócrata; las acusaciones de favoritismo por parte de las elites decisionales del partido durante las primarias por sobre su contendor Sanders y las críticas a su rol como secretaria de Estado (representa el status quo) y no moviliza nuevos electores. Al sumar la variable “problemas de salud” se exaltan los cuestionamientos de sus detractores y genera inseguridad en un electorado tradicional que exalta las capacidades de ejercer el gobierno, en forma enérgica y “vigor físico”, por tanto, en términos comunicacionales se le asocia a “debilidad y cansancio” y esta representación se amplifica al ser una candidata mujer. No se puede obviar la variable sexismo y cultura política que exigen a las mujeres en política más atributos que justifiquen sus capacidades de liderazgo en un régimen presidencialista.
Alwaght: ¿Hay la posibilidad de que otra persona excepto Hilary Clinton y Donald Trump gane las elecciones?
Quiroga: En las lógicas del bipartidismo en EEUU es muy difícil que candidaturas alternativas a las estructuras tradicionales lleguen a ser competitivas en las elecciones presidenciales. Si se genera una crisis de las estructuras hegemónicas, se podría pensar en un escenario tendencial que aparezcan nuevos liderazgos, pero en la actualidad es una democracia sin ciudadanos que funciona en términos globales. La variable representación convencional con distribución de poder institucional es el sello del sistema político estadounidense.
Alwaght: ¿La enfermedad de Clinton podría obligar a los demócratas a buscar otras opciones como Bernie Sanders?
Quiroga: Si la enfermedad de Hillary se agudiza y es evidente que no puede seguir el extenuante ejercicio del rol de candidata, ella debería renunciar para abrir paso al sistema de selección de un reemplazante que ha sido descrito en forma vaga por los partidos. En el caso del partido demócrata el reglamento deja en manos del Comité Nacional la decisión de elegir entre el candidato a vicepresidente que en este caso sería Tim Kaine; el segundo más votado en las primarias Bernie Sanders y la opción de tener a Joe Biden (actual vicepresidente de EEUU). Es un sistema que reproduce el control y mantención de las decisiones en los jerarcas del partido para nominar el candidato(a). En este contexto, si tuvieran lógicas políticas electorales Sanders debería ser la opción al ser más competitivo, pero se pueden imponer los criterios de mantener el status quo y opten por las alternativas más conservadoras.