Alwaght- En el marco de las políticas represivas contra los opositores, el régimen de Bahréin prohibió a tres activistas de los derechos humanos viajar el viernes al extranjero.
El Centro de Bahréin por los Derechos Humanos (BCHR, por sus siglas en inglés) informó el viernes de esta medida adoptada contra el presidente de la Sociedad para la Transparencia en Bahréin, Sharaf al-Mosawi, el abogado Mohamad al-Tayer y un miembro de la Sociedad de Derechos Humanos de Bahréin, Zeinab Jamis.
Tras una hora de esperar, Al-Mosawi y Al-Tayer fueron impedidos de viajar a Arabia Saudí a través del puente del rey Fahad (la cual une Bahréin con Arabia Saudí), según el BCHR.
Al condenar esta medida, el BCHR afirmó que esta decisión del régimen de Al Jalifa contradice las leyes internacionales y las convenciones de Derechos Humanos.
Esto se produjo en el mismo día en que Amnistía Internacional (AI) y el Parlamento Europeo (PE) demandaran por separado liberar el presidente del Centro de Bahréin para los Derechos Humanos (BCHR, por sus siglas en inglés), Nabil Rayab, y retirar todos los cargos en su contra.
El Parlamento Europeo también pidió la inmediata liberación del sheij Ali Salman, secretario general del principal partido opositor Al-Wefaq y otros activistas pro derechos humanos bahreiníes encarcelados sólo por ejercer su derecho a la libertad de expresión.
Durante los últimos dos meses, el régimen de Al Jalifa intensificó las políticas represivas contra los opositores. El pasado 20 de junio, el Ministerio del Interior de Bahréin informó de la revocación de la ciudadanía al máximo clérigo chií del país, el sheij Isa Ahmad Qasem, al acusarlo de ser involucrado activamente en “crear un ámbito sectario” a través de contactos con poderes extranjeros.
Cientos de bahreiníes celebraron el viernes manifestaciones en diversas partes del país para expresar su solidaridad con el sheij Isa Qasem. Sin embargo, como siempre las fuerzas del régimen de Al Jalifa reprimieron las protestas al utilizar gases lacrimógenos.
Esta medida adoptada contra el prominente clérigo chií de Bahréin se produjo después de que el régimen de Al Jalifa suspendiera el pasado 14 de junio las actividades del principal partido opositor bahreiní Al-Wefaq y congelara sus activos en el pequeño país del Golfo Pérsico.