Alwaght- Dos días después del viaje del presidente de EEUU, Barack Obama, a Riad (capital de Arabia Saudí), el rey saudí, Salman bin Abdelaziz, invitó al primer ministro de Irak, Haidar al-Abadi, a viajar a Riad. Además el embajador saudí en Bagdad, Thamer al-Sabhan, expresó la disposición de su país para enviar fuerzas a Irak para, lo que él llamó, “la lucha contra el grupo terrorista Daesh”.
Durante su viaje a Riad, Obama instó a los países árabes ribereños del Golfo Pérsico a brindar más apoyo político y económico al Gobierno de Irak y a comprometerse más con la lucha de los iraquíes contra Daesh. Tras duras críticas de Obama a los países árabes ribereños del Golfo Pérsico en las últimas semanas, es la primera vez que EEUU llama a los árabes a participar más en los acontecimientos de Irak. En una entrevista concedida recientemente a la revista estadounidense The Atlantic, Obama tachó a los árabes de “oportunistas” por presionar a EEUU para que se implique en complicados conflictos que están lejos de sus intereses, sin que ellos pongan nada de su parte. Anteriormente, el secretario de Defensa de EEUU, Ashton Carter, en una entrevista con la misma revista, había acusado a los países árabes ribereños del Golfo Pérsico de falta de seriedad en la lucha contra “sus enemigos”. “Si nos fijamos dónde los iraníes ejercen su influencia, vemos que ellos están en el juego, sobre el terreno”, dijo Carter (en referencia al papel de Irán en Siria).
La agencia de noticias estadounidense Associated Press (AP) también ha informado que Obama y Carter, en reuniones mantenidas con el rey saudí y representantes de los países árabes, respectivamente, han pedido más apoyo para Irak en su lucha contra Daesh. Por tanto, parece que EEUU intenta disminuir la influencia de Irán en Irak a través de esta medida. Carter instó a los árabes a ayudar a Irak para reconstruir la ciudad central de Hit, Ramadi y provincia occidental de Al-Anbar.
En una conversación telefónica, el rey saudí invitó al primer ministro de Irak a visitar Riad. Según el diario saudí Al-Watan, Salman bin Abdelaziz aseguró el apoyo de la monarquía de Al Saud a Irak en todos los terrenos e invitó una vez más a Haidar al-Abadi a viajar a Riad con el fin de estudiar las relaciones bilaterales. Por su parte, Saad al-Hadithi, el portavoz de la oficina del primer ministro iraquí, declaró que enfrentar el terrorismo y garantizar la estabilidad en la región requiere más cooperaciones mutuas entre los hermanos árabes y añadió que la mencionada invitación llega en un momento apropiado para estudiar la perspectiva de la cooperación bilateral en el marco del interés mutuo, especialmente, en el campo de la lucha contra el terrorismo. Al mismo tiempo, el embajador saudí en Bagdad, Thamer al-Sabhan, expresó la disposición de su país para enviar tropas a Irak con el fin de luchar contra Daesh. Además alegó que Riad ha enviado ayudas a los residentes en Al-Anbar, Faluya y Hit, con el permiso del Gobierno de Irak.
Los esfuerzos para solucionar la crisis política
Los intentos de Riad para fortalecer su influencia sobre Bagdad, con el asesoramiento de las autoridades estadounidenses, se ponen en práctica en un momento propicio dada la crisis política en el Gobierno iraquí. Cientos de seguidores del Movimiento Sadr de Irak celebraron el sábado una vez más manifestaciones en la plaza Tahrir en Bagdad, la capital, para exigir reformas políticas. El líder de este movimiento, Muqtada al-Sadr, llamó a sus seguidores a celebrar una protesta multitudinaria el lunes para exigir reformas y poner fin a crisis política en el país. Esto se produce mientras que el presidente del Parlamento iraquí, Salim al-Yaburi, mantuvo el sábado una reunión con los diputados que llevan a cabo una sentada desde hace diez días en el Parlamento e intentó convencerlos para retomar las actividades legislativas.