Alwaght- La XIII cumbre de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) inició el jueves en la ciudad turca de Estambul.
Ese evento de dos días estudiará diversos temas como la lucha contra el terrorismo y el extremismo radical que afecta al mundo, especialmente en la región de Oriente Medio.
La cumbre contó con la asistencia del presidente iraní, Hasan Rohani, quien ofreció el jueves un discurso, en el cual calificó al régimen de Israel como la principal fuente de violencia y extremismo.
Además se refirió a las relaciones entre Irán y Arabia Saudí y subrayó que Irán con su política transparente de alejarse de cualquier situación que alberga tensión o inestabilidad en la región, pretende ampliar la unidad y solidaridad con los pueblos islámicos.
Por su parte, el vicecanciller iraní Abás Araqchi, quien también se encuentra en Estambul, ha denunciado la conducta parcial de la OCI y su fracaso en fortalecer la unidad del mundo del Islam.
En una entrevista telefónica, Araqchi criticó que los 200 artículos de la declaración final de la XIII Cumbre de la OCI, que incluye cuatro antiraníes, se han preparado en ausencia de Irán, al mismo tiempo que denunció que ni siquiera se haya permitido a Irán defenderse.
Estos artículos tienen sus raíces en el empeoramiento de las relaciones diplomáticas entre Teherán y Riad tras la ejecución del prominente clérigo chií Nimr Baqer al-Nimr en el pasado mes de enero, según el diplomático iraní.
Este viernes será celebrado el segundo día de esta cumbre, con la participación de altas autoridades de los 57 países miembros de la OCI, incluido el mandatario persa.
