Los chiíes de la ciudad de Al-Qatif expresaron su apoyo al líder religioso y condenaron la sentencia de su muerte emitida por el régimen de Riad y exigieron a las autoridades de Arabia Saudí, que liberen del clérigo destacado chií.
Sheij Nimr Baqer al-Nimr, detenido el 8 de julio de 2012 tras ser herido de bala, fue condenado a la pena capital el 15 de octubre de 2014 por defender los derechos de los prisioneros y desobedecer a la familia real saudí.
Tras darse a conocer la sentencia contra Al-Nimr, Amnistía Internacional (AI) aseguró que la decisión “es parte de una campaña de las autoridades de Arabia Saudí para aplastar toda disidencia, incluidos los defensores de los derechos de la comunidad musulmana chií” y urgió al régimen de Al Saud a anular “de inmediato” la condena a muerte.
Su arresto y sentencia a muerte ha desatado una protesta masiva de los movimientos religiosos del Mundo de Islam quienes han advertido al régimen saudí de las consecuencias de su decisión para sentenciar a sheij Nimr Baqer al-Nimr a muerte.