Alwaght- El presidente ruso, Vladímir Putin, ha arremetido contra las autoridades del Gobierno de Ankara considerándolas como "cómplices del terrorismo" tras derribar el bombardero ruso Su-24 en territorio de Siria.
"Este suceso se sale de los marcos de la lucha contra el terrorismo. Pero la pérdida de hoy está vinculada con un golpe que nos han dado a traición cómplices del terrorismo", ha sostenido Putin durante una reunión mantenida este martes con el rey Abdalá II de Jordania.
El mandatario ruso ha lanzado estas declaraciones unas horas después de que el Ejército del país turco derribara un avión de combate ruso bajo excusa de violar en repetidas ocasiones su espacio aéreo y hacer caso omiso a las advertencias.
A juicio de Putin, el aparato Su-24 y su tripulación no amenazaron la seguridad de Turquía, y solamente cumplían una misión en la lucha contra el Estado Islámico (Daesh) en Siria.
Según el jefe del Kremlin, tal acción «tendrá consecuencias graves» para las relaciones entre Moscú y Ankara.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso al confirmar el derribo de uno de sus cazas 'SU-24' ha rechazado energéticamente que el aparato haya cruzado a territorio turco, pues ha caído en el lado sirio de la frontera.
Ante esta situación, el Gobierno de Moscú, que ha considerado la intervención turca "un asunto muy serio", ha convocado de urgencia a su gabinete de seguridad. Por otra parte, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), con la que Turquía ha contactado por orden del primer ministro turco Davutoglu, ha anunciado una reunión extraordinaria este martes por la tarde para tratar la cuestión.
Con fecha anterior, Ankara había llamado al embajador ruso en Turquía para protestar por el apoyo ruso a las fuerzas leales al presidente sirio Bashar al-Asad en su lucha contra grupos terroristas.