Alwaght- Uno de los principales desafíos que enfrenta el régimen de Israel en los territorios ocupados palestinos es la crisis de la reducción de la población. Por lo tanto, las autoridades del régimen de Tel Aviv tratan de aprovecharse de las crisis y sucesos terroristas que ocurren en los países europeos para aumentar la población israelí.
El régimen de Israelí está profundamente preocupado por el hecho de que la población de los árabes residentes en los territorios ocupados vaya en aumento, superando el número de los ciudadanos judíos israelíes, por lo que recurre a todos los medios posibles para atraer a los judíos de todos los países del mundo, sobre todo en Europa.
Según las estadísticas publicadas en los centros de investigación occidentales, la población israelí es de unos seis millones de habitantes, de los cuales cinco millones son judíos y el resto son de origen árabe y viven en las zonas norteñas de los territorios ocupados. Por otra parte, en Cisjordania y la Franja de Gaza viven cuatro millones de palestinos –precisamente 2,5 millones en Gaza y 1,5 millones en Cisjordania. Por lo tanto, se puede llegar a esta conclusión que la población de los árabes residentes en los territorios ocupados supera a la de los judíos. Además, debido a su cultura occidental, el índice del crecimiento poblacional es bajo entre los judíos, mientras la población árabe está creciendo día en día.
Desde luego, si consideramos también los cinco millones de refugiados palestinos en Jordania, Siria y El Líbano, la población palestina será dos veces más grande que la de los judíos, por lo que si de conformidad con los estándares internacionales, se celebra un referéndum o unas elecciones libres en los territorios ocupados, los árabes ganarán más votos. Allí está la raíz de la preocupación del régimen de Tel Aviv.
El crecimiento de la población de los árabes en los territorios ocupados no solo generará una crisis demográfica para los sionistas, sino también intensificará la crisis de identidad entre los residentes de las tierras bajo el control del régimen de Israel, que impedirá la formación de una identidad única entre los judíos.
Para enfrentar la crisis demográfica, el régimen israelí ha tomado una serie de medidas, la mayoría de ellas destinadas a incitar a los judíos residentes en otras partes del mundo, incluida Europa, a vivir en los territorios ocupados. Esta política normalmente se aplica cuando los judíos residentes en otros países enfrentan una deteriorada situación de seguridad, es decir que hay amenazas internas o externas contra ellos. En este caso, los judíos abandonan sus casas rumbo a los territorios ocupados. Las autoridades israelíes se aprovechan de las precarias situaciones de seguridad para animar a los judíos en Europa u otras partes partes del mundo que emigren a los territorios ocupados.
Durante los últimos años, cada vez que se ha registrado un atentado terrorista en un país europeo que ha amenazado los intereses de los judíos, las autoridades sionistas se han aprovechado de la situación para incitar a los judíos a migrar a los territorios ocupados. La mayoría de los judíos en Europa viven en Francia con una población de 600 mil personas. Esta comunidad siempre ha sido objeto de los ataques realizados por los mercenarios y las personas desconocidas. El año pasado, tras un ataque contra la sinagoga Copenhague en Francia, el premier del régimen israelí llamó a los judíos migrar a los territorios ocupados. En aquel entonces, Netanyahu dijo durante una reunión de su gabinete que “otra vez los judíos murieron en Europa” y agregó que “continuarán los ataques contra los judíos en Europa”. Netanyahu pidió a los judíos en toda Europa que viajen a los territorios ocupados y vivan ahí para siempre ya que, según él, “Israel es la única casa para los judíos”.
En paralelo con esos ataques contra los judíos y sus posiciones en Francia, que normalmente son realizados por mercenarios y hombres desconocidos, los medios occidentales desatan una nueva ola propagandística contra los musulmanes que tiene dos objetivos: empañar la imagen del Islam por un lado y animar a los judíos a abandonar los países europeos por otro.
Sin embargo, las propagandas mediáticas y los llamamientos de las autoridades israelíes no han podido convencer a los judíos que migren a los territorios ocupados. El año pasado, la revista Bloomberg señaló en un informe que a pesar de las amplias propagandas encaminadas a asustar a los judíos sobre seguir viviendo en Europa, un pequeño número de ellos han emigrado a los territorios ocupados. Según el informe, en 2014 solo un uno por ciento y medio de los israelíes residentes en Francia se han trasladado a los territorios ocupados palestinos. La cifra de los judíos que han abandonado otros países europeos para vivir en los territorios ocupados es mucho menos.