Esta serie de fracasos sucesivos obligaron a Arabia Saudí a adoptar otra medida. En este sentido, los saudíes reclutaron a mercenarios provenientes desde Sudán y últimamente han firmado contratos para desplegar militares colombianos en Yemen. Mientras tanto, aparentemente el asunto va más allá que un contrato militar y la empresa estadounidense Blackwater dirige todo el alboroto. Algunas fuentes indican que los esbirros de la firma Blackwater en nombre de militares retirados del Ejército colombiano entrarán en Yemen.
Según informó hace unos días el diario colombiano El Tiempo, más de 800 exmilitares de las fuerzas especiales del Ejército colombiano se presentarán en los próximos meses en Saná, capital de Yemen, para respaldar la ofensiva de Arabia Saudí y sus aliados, según fuentes militares.
Colombia se considera uno de los principales centros de reclutamiento y entrenamiento de los efectivos de Blackwater, puesto que Estados Unidos tiene gran influencia en este país y mucha gente califica a Colombia de Israel latinoamericano.
La firma Blackwater es la primera organización terrorista a nivel mundial en reclutamiento de mercenarios. La empresa ha formado un ejército especial y escuadrones de muerte, además tiene en su posesión una flota de aviones y una división con más de 2700 soldados preparados. El lema de operaciones de combate de Blackwater es: "Mata luego asegúrate si es enemigo o no".
La mencionada empresa es una organización militar de seguridad que da inmunidad a sus miembros frente a toda medida de procesamiento, en virtud de una ley aprobada durante el anterior Gobierno de Estados Unidos. El papel destacado de este organismo salió a la luz tras la invasión estadounidense a Irak, cuando los militares norteamericanos cometieron crímenes terribles contra la nación iraquí, principalmente en Faluya. Además, la firma cuenta con antecedentes negros en Afganistán.
El despliegue de tropas de esta empresa en el territorio yemení da a conocer que Arabia Saudí busca rescatarse, a cualquier costo, del pantano de Yemen, pues la presencia de mercenarios armados hasta los dientes de Blackwater en el país árabe repetirá la tragedia de Faluya.
Es de recordar que en los últimos meses Arabia Saudí se ha enfrentado a numerosos desafíos. El régimen de Riad ha gastado millones de dólares en la guerra de Yemen, pues no ha alcanzado éxito alguno, mientras que la caída del precio del petróleo ha dañado enormemente la economía de la monarquía saudí, hasta el punto que según el informe de 'The Independent' Arabia Saudí quebrará para el 2020. La divergencia entre los príncipes saudíes ha recrudecido la inseguridad política y económica.
En la actualidad, el régimen de Riad ha llegado a un punto que para alcanzar sus objetivos en Yemen recluta a asesinos. El asunto podría mancillar cada vez más la imagen de Arabia Saudí ante los musulmanes, puesto que ningún musulmán olvida los crímenes de Blackwater en Irak y Afganistán, así que al parecer se debe esperar más catástrofes humanitarias en Yemen.