Tras el rezo colectivo del viernes, cientos de palestinos se manifestaron en varios puntos cercanos a la valla fronteriza con los territorios palestinos ocupados por el régimen de Israel en el norte, este y sur de Gaza, en los que murieron siete palestinos y alrededor de 80 resultaron heridos por disparos del las fuerzas de seguridad israelí, según fuentes médicas palestinas.
Se trata de las primeras revueltas en el enclave costero desde que se iniciaron las manifestaciones antiisraelíes en todos los territorios palestinos, en particular en Al-Quds.
Los incidentes se produjeron después de que el subjefe de la dirección política del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS), Ismail Hanie, en su alocución durante el rezo colectivo llamó a los palestinos a lanzar una Intifada (levantamiento) con el fin de “liberar Al-Quds” de décadas de ocupación bajo régimen israelí.
"Confirmo que Gaza apoya la batalla por Jerusalén y por (la mezquita de) Al Aqsa y apoya la bendita intifada a pesar del dolor, el bloqueo y las conspiraciones", dijo el dirigente de HAMAS, añadiendo que el enclave costero "está preparado para unirse a una intifada completa".
También se dieron disturbios en Cisjordania, sobre todo alrededor de Al-Jalil (Hebrón), en Nablus y Qalquilia, en el norte, y en Ramalá y Al-Bire, al norte de Al-Quds. Durante estos choques cerca de 60 palestinos resultaron heridos.
En la ciudad cisjordana de Afula, los agentes policiales del régimen de Israel tirotearon a una joven árabe en Cisjordania, alegando que se disponía a atacar con un cuchillo a las fuerzas de ocupación.