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Alwaght- Tras una larga espera, el Gobierno ruso ha elegido por fin una nueva opción en sus políticas para Oriente Medio: poner en marcha una directa intervención militar dentro del territorio sirio en el marco de una coalición de cuatro países (Rusia, Siria, Irak e Irán). Esta medida ha provocado la reacción de varios países occidentales, entre ellos, Estados Unidos. Mientras que los aviones de guerra rusos llevan a cabo bombardeos contra las posiciones del grupo terrorista Daesh en territorio sirio, los países occidentales alegan que la mayoría de estas correrías aéreas apuntan principalmente las posiciones de los que llaman opositores moderados al gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad.

Considerando la postura occidental, el principal objetivo de Rusia no es derrotar al grupo terrorista, sino medirse con la coalición anti-Daesh, liderada por Estados Unidos, en el campo de batalla sirio.

Por otra parte, varios expertos y analistas creen que Rusia después de desgastarse en el escenario del este de Ucrania, busca logros relativos en Siria para luego poder negociar con el Occidente en lo referente a Ucrania y Siria.

Otra hipótesis que se baraja mucho en los últimos días habla de posibilidad de que Rusia, mediante sus ataques contra el grupo radical de Daesh, trata de garantizar la continuidad en el poder del presidente Al-Asad.

Ante esta situación, varios medios de comunicación creen que, con su presencia en el territorio sirio, Rusia e Irán tienen como objetivo formar un gobierno alawí en las costas occidentales del país árabe. Desde este punto de vista, Irán y Rusia han hecho todas las coordinaciones necesarias a diversos niveles e incluso el presidente ruso, Vladimir Putin, ha convencido al primer ministro israelí de que los avatares de Siria y la presencia militar de Rusia en este país no representan ningún peligro para Tel Aviv. Otros más creen que la intervención rusa conllevará la desintegración de Siria.

Los escenarios más posibles

En cuanto al futuro de los avatares de Siria y la presencia militar de Rusia en el país árabe se abordan varios escenarios.

Primer escenario: Rusia ampliará su coalición de cuatro países en Siria con más miembros, pero no va a involucrarse demasiado y no participará de forma directa en ninguna operación terrestre. No obstante, hacerse con una victoria total ante el grupo terrorista de Daesh parece una tarea muy difícil, pues en tales guerras, las fuerzas aéreas no serán capaces de imponerse al enemigo sin el apoyo de las fuerzas terrestres. Ante esta situación, es muy probable que China se incorpore a la coalición de cuatro países, así que se escuchan noticias de una y otra parte respecto al despliegue de hasta 1000 tropas chinas especiales en territorio sirio con el objetivo de apoyar las operaciones áereas de Rusia. En caso de que esta noticia sea cierta, seremos testigos de una evolución de gran envergadura en el oeste de Asia en lo referente a la coalición anti-terrorismo.

Segundo escenario: Entre otras reacciones del Occidente ante las ofensivas aéreas de Rusia contra Daesh, es muy posible que Washington aumente sus apoyos a los llamados grupos moderados de oposición siria.

Este escenario es probable debido a que durante el último año, EEUU y sus aliados no han conseguido ninguna victoria en su lucha contra los grupos terroristas y si Rusia se hace con esa victoria, el país norteamericano deberá abandonar la región dejando su lugar a los rusos. Según un informe de Reuters, citando a autoridades estadounidenses, Washington está estudiando la posibilidad de aumentar sus apoyos a los llamados grupos armados moderados en cuanto a el envío de armamentos y entrenamiento militar.

El tercer escenario: Los esfuerzos de EEUU para desprestigiar la imagen de Rusia en el concierto de las naciones suníes, mediante propagandas mediáticas, es otra opción posible que es viable en la medida que Rusia consiga más victorias ante los grupos terroristas. En este sentido, los medios de comunicación intentan interpretar como una ocupación la presencia Rusia y sus operaciones militares dentro del territorio sirio.

El cuarto escenario, el más posible

Al parecer, la coalición de cuatro países es capaz de ampliarse atrayendo a más miembros, entre ellos China. Una vez que se incorpore China a esos cuatro países, la coalición contará con dos miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU con derecho a veto, hecho que elevará la importancia de la coalición y facilitará la incorporación de más Estados a esta entidad. Por su parte, Pekín parece muy entusiasmado en tomar parte en la solución de la crisis siria de forma directa, pero aun así a la coalición le falta formar una fuerza terrestre para hacerse con una victoria determinante.

La violencia en Siria, desatada en 2011 por grupos terroristas apoyados desde el extranjero, ha causado la muerte de más de 240.000 personas, además de dejar más de 11 millones de desplazados.