Alwaght- Corea del Sur no cesará su guerra propagandística mientras Corea del Norte no se disculpe por sus dos presuntos ataques contra el país vecino y que han desatado una de las mayores crisis militares de los últimos años entre los dos países.
Así ha advirtió el lunes la presidenta surcoreana, Park Geun-Hye, afirmando que de no obtener las disculpas norcoreanas, continuarán funcionando los altavoces que emiten propaganda contra el régimen de Kim Jong-un en la Zona Desmilitarizada (DMZ) y que han desatado las iras de Pyongyang.
Corea del Norte debe pedir "disculpas claras" y prometer no hacer "nuevas provocaciones", declaró la jefa del Estado surcoreano en una reunión con sus consejeros.
Además, ha amenazado con tomar nuevas medidas de represalia contra su vecino norteño, tal y como ha anunciado previamente el Ministerio de Defensa, que indica que el Norte ha doblado sus unidades de artillería en la frontera y desplegado medio centenar de submarinos militares.
Según informa la agencia surcoreana Yonhap, Corea del Norte ha desplegado una decena de embarcaciones anfibias transportando fuerzas especiales hacia una base naval a 60 km del límite fronterizo reconocido al norte.
Las tensiones entre las dos Coreas, se intensificaron a principios de esta semana, concretamente el jueves, cuando Seúl acusó a Corea del Norte de disparar proyectiles hacia una de sus bases militares sobre la zona desmilitarizada, y seguidamente se apresuró a tomar represalias con decenas de rondas de artillería pesada.