En aquel periodo, vimos el cumplimiento de una serie de las
demandas kurdos en Turquía, pues el Gobierno de Recep Tayyip Erdogan
preparó el terreno para mejorar la situación de los kurdos en el país.
Además, la opinión pública turca reconocía la existencia de la cuestión
kurda más que antes y los opositores kurdos podían realizar sus
actividades políticas más fácil que antes.
En aquella etapa, el grupo PKK todavía no tenía actividades como
ahora y el Partido Democrático del Pueblo (HDP, por sus siglas en turco)
actuaba más en el escenario político de Turquía. El fundador y líder de
este grupo, Abdolá Ocalan, inició sus actividades políticas en aquel
periodo y sus métodos positivos aumentaron sus seguidores, como lo que
vimos en las recientes elecciones en Turquía que los candidatos, quienes
fueron seguidores de Abdolá Ocalan, además de las provincias kurdas, en
Estambul y otras provincias podían conseguir unos miles de votos.
Selahattin Demirtas, el líder del HDP, que en las elecciones
presidenciales ganó el 10 % de los votos y no solo entre los kurdos,
sino también entre los turcos pudo obtener popularidad, se esforzó mucho
para captar más votos en las últimas elecciones legislativas mediante
su discurso basado en “poner fin a las violencias”, “poner énfasis en la
igualdad de todos los grupos étnicos y religiosos”, “la hermandad entre
los kurdos y turcos”, entre otros. Como consecuencia, vimos que el
partido pro-kurdo HDP pudo ganó la confianza de los votantes exactamente
como el partido turco de extrema derecha Acción Nacionalista (MHP). Sin
embargo, este proceso positivo no se mantuvo y hace unas semanas se
reiniciaron los enfrentamientos entre los integrantes del PKK y el
ejército turco. Durante los últimos días, fuerza aérea turca ha
bombardeado las posiciones y basas del PKK.
Bombardeos a las posiciones de Daesh y el PKK
La colaboración de los kurdos con la coalición anti-Daesh en el
norte de Siria causó que se planteen dos predicciones importantes en los
círculos políticos de Turquía: 1) algunos analistas dicen que las
Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG, en kurdo) y el Partido de
la Unión Democrática (PYD, en kurdo), mediante su lucha contra el grupo
terrorista EIIL (Daesh, en árabe) intentan convertirse en una fuerza
popular no terrorista y, de este modo, sacar al PKK de la lista de
organizaciones terroristas internacionales. 2) casi todos los medios de
comunicación en Turquía creen que los kurdos, tras la conquista de la
ciudad de Tal Abyad (en el norte de Siria), pasan por la ciudad de
Raqqa, al norte de Siria, y tratan de tomar el control total de las
ciudades kurdas de Jazire, Kobani, Jarabulus, Afrin y Azaz. De hecho,
según esta predicción, los kurdos buscan formar un estado autónomo y
obligar a Turquía a reconocer su estado.
Cuando PKK obtuvo 80 escaños en las elecciones de 7 de junio y
muchos kurdos estaban decepcionados del premier turco, Ahmet Davutoglu, y
de sus compañeros, el partido gobernante tuvo que hacer una coalición
con los partidos de oposición para obtener la mayoría absoluta del
Parlamento y crear un Gobierno. Mientras tanto, los líderes de HDP, muy
contentos de su victoria electoral, anunciaron: 1) De ninguna manera,
vamos a hacer una coalición con el Partido de Justicia y Desarrollo
(AKP, en turco). Este partido y sus hijos robaron el dinero de nuestros
hijos. 2) Estamos listos para asumir el cargo y mostrar el mejor modelo
de gobernar el país. 3) No dejamos que Erdogan sea el presidente de
nuevo. 4) Contamos con los kurdos de Siria y enorgullecemos de su
resistencia.
Por un lado, Selahattin Demirtas pidió al PKK no utilizar sus armas
pero después de unas horas, anunció que la fracción kurda lo aceptará
solo con la solicitud directa de Ocalan. Por otro, el consejo de
liderazgo del PKK no dejó a los diputados kurdos elegidos por el pueblo
que den la iniciativa. En cambio, criticó rotundamente el enfoque de
Ankara respecto a los kurdos, llamó al Gobierno cómplices de Daesh y
pidió de la gente que forme su fuerza de defensa y aún cave túneles y
escondites. Las posturas tomadas por los oponentes kurdos del Gobierno
turco alentaron a otros partidos de oposición a criticar al AKP y acusar
al partido gobernante de ser incompetente e incapaz en el manejo del
terrorismo. Como el resultado, las estrategias duras de los líderes del
PKK y el HDP, los acuerdos de EEUU y Turquía sobre Siria, la decisión de
hacer frente a Daesh y apoyar a los oponentes de Asad crearon un ámbito
en el que Turquía fue animada bombardear las posiciones de Daesh y PKK.
La incertidumbre sobre el futuro de las conversaciones de paz
En general puede decirse que, por un lado, el acuerdo especial
entre Turquía y Estados Unidos para cambiar el balance de poder en Siria
y la preocupación de Ankara sobre el poder de los kurdos en el norte de
Siria, la decepción del AKP por el cambio repentino de los intereses
políticos de los kurdos y la desconfianza en los líderes del PKK se
encuentran entre las principales razones de los ataques de aviones de
combate turcos. Por otro lado, los actos violentos y el lenguaje áspero
del PKK justificaban las medidas tomadas por Ankara, de modo que EEUU,
Europa y la ONU respaldaron en el acto los bombardeos. El asesinato de
dos policías turcos en sus hogares y en frente de los miembros de su
familia, la quema de decenas de coches, ataques a estaciones de policía y
la disminución del papel de los diputados kurdos del Parlamento son
algunos de los errores importantes del PKK.
Las autoridades de la rama europea del PKK afirmaron en su visita
con Selahattin Demirtas que hasta cuando no oigan de Ocalan, no tomarán
nuevas decisiones. También, Turquía ha anunciado que hasta cuando todas
las fuerzas del PKK no salgan de los territorios de Turquía, no detendrá
los ataques.
Los conflictos recientes han mostrado que Turquía y el PKK otra vez
están a punto de una guerra pero la verdad es que no pueden resolver
sus problemas siguiendo este camino y deben regresar a la mesa de
conversaciones de nuevo.