Según el Centro de Redes Sismológicas de China, la intensidad de la primera explosión fue equivalente a 3 toneladas de trilita, mientras que de la segunda y la colosal se produjo unos segundos después, fue equivalente a 21 toneladas de trilita.
El instituto sismológico chino detalló que la gran explosión pudo sentirse en ciudades tan alejadas como Gaocheng, a más de 200 kilómetros de Tianjin.
Varias fuentes han informado que los hospitales están desbordados por la gran afluencia de heridos. Treinta y dos de los heridos se encuentran en estado crítico.
En este sentido, el presidente de China, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang, han exigido el mayor esfuerzo posible para salvar a los heridos, rescatar a los desaparecidos y minimizar los daños provocados por la explosión.
De la misma forma, dichas autoridades se han comprometido a identificar con celeridad la causa del accidente y castigar severamente a los responsables.
De acuerdo con los informes publicados, varios edificios han colapsado por las explosiones y el fuego se está expandiendo y se han incendiado varios coches. Por otra parte, varios bomberos que trabajan en la extinción de las llamas también han resultado heridos, mientras que dos se encuentran desaparecidos.
Tianjin se trata de una ciudad de más de 8 millones de habitantes, el principal puerto del norte de China, a 100 kilómetros al sureste de Pekín.