Notas filtradas y documentos técnicos de la NSA indican que la información altamente sensible del funcionamiento interno del Gobierno japonés en temas como las relaciones con Estados Unidos, cuestiones comerciales o la política sobre el cambio climático, fue obtenida por esta agencia de forma rutinaria.
En el viaje de Shinzo Abe a Washington, el pasado 28 de abril, el presidente estadounidense, Barack Obama, describió a Japón como "uno de los aliados más cercanos de Estados Unidos en el mundo".
De acuerdo con las notas publicadas por WikiLeaks, la NSA espía a conglomerados japoneses, funcionarios del Gobierno, ministerios y asesores de alto rango desde hace casi 10 años.
Es importante mencionar que entre los objetivos de la NSA figuran funcionarios del Banco Central de Japón y el Ministerio de Finanzas, el ministro de Economía, Comercio e Industria, Yoichi Miyazawa, la división de gas natural de Mitsubishi y la división de petróleo de Mitsui.