Historia de Al-Quds: Esta ciudad fue declarada en el año 1947 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como “un corpus separatum bajo un régimen internacional especial y administrado por las Naciones Unidas”. Sin embargo, un año después, el régimen de Israel con el apoyo de Estados Unidos y los países europeos ocupó esta ciudad después de unos meses de guerra. En el año 1948, Al-Quds se dividió en dos partes, oriental y occidental. Los israelíes declararon la parte occidental como su capital política y administrativa e instalaron ahí sus oficinas estatales y su parlamento. A partir de entonces, el régimen israelí ha tratado de conseguir el reconocimiento internacional para trasladar todas las embajadas de los países extranjeros de Tel Aviv a Al-Quds, pero en esta vía no han tenido mucho éxito.
La Guerra de los Seis Días en el año 1967 dio lugar a que el régimen de Israel ocupe Cisjordania, la Franja de Gaza y la parte oriental de Al-Quds. Asimismo, el régimen de Tel Aviv tomó el control del Monte del Templo o la Explanada de las Mezquitas, que hasta ese momento se encontraba en la zona geográfica de Jerusalén Este. Desde aquel entonces, los sionistas llevan a cabo masivos proyectos para colonizar Cisjordania ocupada y la parte oriental de Al-Quds a través de la construcción de asentamientos ilegales para colonos judíos. Desde 1948, el régimen de Israel ha construido un gran número de colonias en los territorios ocupados palestinos, donde actualmente viven más de medio millón de judíos, incluidos unos 250.000 que residen en los asentamientos construidos en Jerusalén Este.
Por otra parte, los sionistas con dos proyectos de construcción de asentamientos ilegales y el muro de separación en Jerusalén Este, prácticamente han dividido la Cisjordania en dos partes, norteña y sureña, con el fin de impedir la formación de un Estado independiente e integral de Palestina en estas regiones. Actualmente, el apoyo al gran Jerusalén como la capital del régimen sionista, es uno de los lemas políticos de los partidos izquierdistas y derechistas de Israel.
El Día Mundial de Al-Quds
Mensajes: En las primeras líneas del artículo se explicaron las políticas expansionistas y agresivas del régimen sionista. Gracias al entendimiento de estas políticas, el fundador de la República Islámica de Irán, el Imam Jomeini (que descanse en paz) declaró el último viernes del sagrado mes de Ramadán como el día de solidaridad con el pueblo palestino y rechazo al apartheid israelí. En los años posteriores a la Revolución Islámica de Irán, este día se ha ido conmemorando en varios pueblos del mundo pero hoy ha aumentado su importancia debido a los trágicos acontecimientos en la región, ya que:
1. En el Día Mundial de Al-Quds, la nación iraní expresa su apoyo a los ideales de revolución islámica y su líder. Durante los días de su liderazgo, el Imam Jomeini consideró a Israel como un problema serio y, uno de sus primeros actos después de la revolución, fue cortar los lazos con Israel y sustituir a los palestinos en la embajada israelí en Irán.
2. El profeta Mohamed (la paz esté con él) dijo: Si un musulmán oye el grito de ayuda de otro musulmán y no le ayuda, no es un musulmán. La marcha del Día Mundial de Al-Quds muestra que los musulmanes obedecen a su profeta. En este día, los seguidores del profeta Mohamed expresan su identidad islámica a través de su apoyo a los palestinos.
3. El Día Mundial de Al-Quds es una oportunidad para anunciar el apoyo a los oprimidos. En las últimas semanas, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU publicó su informe de la guerra de 51 días del año pasado entre Palestina e Israel en el que acusó a régimen israelí de violar los derechos de niños y mujeres palestinos y de cometer crímenes de guerra. En este informe, el Consejo pide a Israel reparar estos daños.
4. El Día Mundial de Al-Quds sirve para expresar la oposición a las políticas de régimen israelí para judaizar Al-Quds. Mientras las organizaciones internacionales y órganos de derechos humanos ignoran los actos ilegales de Israel y los países islámicos se preocupan en sus propios problemas y crisis, actualmente, los sionistas ejecutan sus planes para cambiar la identidad de Al-Quds lo antes posible a través del desarrollo de asentamientos y no permitiendo la reconstrucción de los hogares y edificios palestinos.
5. El mensaje del Día Mundial de Al-Quds para los palestinos es que deben resolver las diferencias internas, alcanzar su unidad otra vez y, finalmente, organizar y movilizar sus recursos nacionales e internacionales para enfrentar al régimen de Israel.
6. Durante el año pasado, la mayor parte de la energía y la capacidad de los países islámicos fue utilizada para poner fin a los grupos takfiríes liderados por el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe). La invasión de gran parte del territorio de Siria y la mitad de Irak por terroristas takfiríes, su presencia destructiva en El Líbano, Egipto y Libia y sus operaciones suicidas en Kuwait, Arabia Saudí y Túnez durante las últimas semanas, por una parte, han creado una imagen fea del Islam y preparado una buena oportunidad para que los sionistas y sus medios de comunicación propaguen y aumenten la islamofobia en el mundo. Por otra parte, como la crisis creada por los terroristas necesita de la atención constante de los países del frente de resistencia, formado por Irán, Irak, Siria y el Hezbolá de El Líbano, el régimen sionista también tiene una situación perfecta para avanzar en sus objetivos.
La celebración gloriosa de la marcha del Día Mundial de Al-Quds disfruta de muchos resultados positivos;
1. A través de la marcha, los musulmanes dejan claro una vez más que su enemigo número uno es Israel y no los takfiríes o grupos terroristas liderados por los sionistas.
2. A pesar de las crisis regionales, los musulmanes otra vez muestran su apoyo a los palestinos y anuncian que Israel es el enemigo principal de la comunidad islámica.
3. A pesar de muchas diferencias de opinión entre los países islámicos, El Día Mundial de Al-Quds sigue siendo el eje de la unidad entre dichos países.
4. Se recalca el papel de Irán como el líder de movimientos de resistencia y los iraníes confirman que creen en los ideales de la revolución islámica.